Heart for 2... Capitulo 23 (Final)

Kwanghee (POV)

-Qué... que diablos...-

Murmuro sorprendido, confundido, incrédulo ante lo que acaba de pasar. Kevin me ha dejado solo, se ha ido con ese chico y su hermano. ¿Qué significa esto? ¿Me está dejando? ¿Va a dejar que me vaya?

-Kwanghee... vamos, te llevo.- estoy tan conmocionado que me cuesta concentrarme en lo que ha dicho Siwan.

-No... no quiero ir contigo...- se que Kevin me ha dejado, eso me tiene en shock, pero al ver el rostro de Siwan recuerdo lo que pasó, el hecho de que haya fingido ser otra persona.

Volteo a ver a mi alrededor, los carros con los guardaespaldas de Kevin empiezan a irse, mi corazón se acelera, ahora, ¿a dónde voy? ¿cómo me voy de aquí?

Comienzo a caminar rumbo a la carretera, se que está un poco lejos, pero no quiero ir con Siwan, no quiero escucharlo.

-No... yo me voy solo...-

Siwan toma mi mano para detenerme, pero jalo para hacer que me suelte, sigo caminando, mi corazón empieza a latir fuerte. Está insistiendo mucho, tengo ganas de llorar. Puedo escuchar sus pasos detrás de mi.

-Vete Siwan!!...- grito sin voltear a verlo.- deja de seguirme!!...-

-No, no lo voy a hacer, tienes que escucharme!.- aprieto mis labios

Acelero el paso, quiero llegar rápido a la carretera.

-Has lo que quieras, pero no pienso ir contigo!.- estoy muy molesto, se que estoy comportándome infantil, pero no me importa, empiezo a correr

-Tsk!...- lo escucho quejarse por mi repentina decisión de correr

No volteo a verlo, simplemente mantengo mi mirada fija hacia la carretera que se ve a lo lejos, mi respiración está acelerada, siento que el aire quema mis pulmones de lo rápido que he corrido. Antes de que pueda alcanzar a llegar volteo cuando escucho el ruido de las piedras detrás de mí. El carro de Siwan!

Me detengo de golpe cuando pasa por un lado y se enfrena tapándome el paso. Mi respiración está demasiado agitada, aún así, sigo sin querer hablar con él, me siento impotente, tanto que las lágrimas empiezan a rodar por mis mejillas.

-Vete!!!...- le grito lo más fuerte que puedo, se ha bajado del auto

-No.... ya te dije que no me iré...- me sujeta de los brazos aprovechando mi cansancio

-¿Qué quieres? ¿Te quieres seguir burlando de mí?...- lo veo enojado

-No, quiero explicarte como pasaron las cosas, no es lo que tu piensas, jamás intenté jugar contigo...- lleva una mano a mi rostro para intentar limpiar mis lágrimas, pero la golpeo para impedir que lo haga

-Suéltame!.-

-Kwanghee, empiezas a desesperarme.- frunzo el ceño, ¿todavía se atreve a molestarse? Es el colmo!!

-Bien! Desespérate lo que quieras!.-

Me giro decidido a regresar a la cabaña abandonada detrás de nosotros, pero me detiene del brazo, está vez con mucha fuerza que me hace quejarme.

-Aush!...-

-Es en serio Kwanghee, no estoy jugando, vienes por las buenas o por las malas...- me le quedo viendo fijamente

No sé si creerle o no lo que está diciendo. Jamás lo he visto molesto, bueno realmente es obvio, ¿cómo iba a verlo molesto si siempre estuvo fingiendo? Sonrío de lado, incrédulo.

-¿Ah sí? ¿por las malas?.- frunce el ceño

-No me tientes...- bufo sin creer y me doy la vuelta

Apenas he dado dos pasos cuando enreda sus brazos alrededor de mi cintura, me sostiene con firmeza, y empieza a jalar de mí de regreso al carro. Empiezo a arrastrar los pies en las piedras intentando detenerme, pero logra acercarme al auto.

-Siwan!... eres un bruto! Suéltame!...-

-No! Te lo advertí, era por las buenas o por las malas!.- me quedo quieto al ver que esto va en serio

Abre la puerta del carro, me señala el interior para que yo solo suba al auto. Hago una mueca molesto, respiro hondo y decido entrar, me cruzo de brazos sin dirigirle la palabra mientras cierra la puerta y rodea el carro para subir.

-Yo no te mentí...- comienza a hablar mientras maneja

-...- no contesto, he decidido no hablar con él. Veo fijamente la carretera, aún con mis brazos cruzados, totalmente negado a conversar

-Tu asumiste todo.- respira hondo...- yo simplemente no te desmentí, creí que sería mejor si conocías al verdadero Siwan antes de dejarte encandilar por el dinero que mi familia pudiera tener.- en definitiva me ha ofendido, volteo a verlo enojado, nota mi molestia de inmediato justifica su pensar.- todos, chicas y chicos se acercan a mi cuando saben que heredaré una gran empresa, no puedes culparme por tomar mis precauciones, me he llevado varios golpes en cuanto al amor se refiere Kwanghee.-

-...- hago una mueca, es buena su explicación, creíble.... de nuevo fija la mirada hacia la carretera

-Además, quería llegar a conocer al verdadero Kwanghee, sin que tuviera que fingir modales o un comportamiento adecuado para salir con alguien como yo.-

-...- sigo sin hablar, pero ya no me siento tan enojado como antes, poco a poco la tensión en mi cuerpo ha desaparecido...

-Después de conocer, estoy seguro que si hubiera llegado y me presento como Im Siwan, ni siquiera hubieras aceptado salir conmigo. Habrías preferido evitarme tal y como lo haces con todos esos clientes de la tienda.-

Hago una mueca, tiene razón, hubiera creído que era uno más intentando comprarme cosas caras... y en definitiva con Kevin fue suficiente.

Por ir enojado, ni siquiera me di cuenta hacia donde se dirigía, simplemente creí que regresaría a Seúl. Aunque ya no tengo donde vivir estaba seguro de que encontraría algo, pero lo primero era que me llevara de regreso.

Sin embargo, esto no parece la ciudad, al contrario, cada momento se aleja más. De nuevo vuelve a internarse entre los árboles, eso me pone alerta, me siento derecho.

-¿A dónde vamos?...- sonríe

-A mi casa para vacacionar...-

-¿Por qué? Llévame de regreso...-

-No empieces...- respiro hondo, le volteo la cara molesto...

Justo se puede ver la casa, es bastante grande, estoy asombrado, blanca por completo, a la orilla del lago, con un pequeño embarcadero, grandes ventanales, alberca y un inmenso jardín. Abro la boca sorprendido.

Cuando detiene el carro me siento intimidado, no pienso bajar así que me aferro al asiento, esto es demasiado lujoso.

-Vamos...- niego con la cabeza...- Kwanghee... –

-No Siwan, ésto es…- lo veo de reojo…- éste lugar no es para mí...- tomó mi mano y me obligó a salir

-Tu lugar es en donde quieras estar, y si es conmigo mejor Kwanghee...-

Me sostuvo de la cintura pegando nuestros cuerpos, nuestros rostros muy cercas. Contengo la respiración, mis ojos se han desviado a sus labios, estoy tentado a rozarlos un poco con los míos, pero no lo hago, se supone que estoy molesto!

Aprieto los labios, lo veo a los ojos, entrecierro los ojos para de nuevo hacerle ver que sigo molesto y desvío la mirada. Lo escucho bufar, se burla de mi actitud, pero no me importa no voy a ceder tan fácilmente, giro de nuevo para reclamarle, pero antes de que pueda decir una sola palabra sus labios me callan.

Siwan (POV)

Sonrío al ver su aniñada actitud, pero me hace ver que ya no está tan molesto, solo está haciéndose el difícil por orgullo. Bufo, ¿orgullo? ¿y cuándo pensaba decirme lo de Kevin? Niego con la cabeza sonriendo.

No puedo resistirme más, desde su primer desplante he tenido ganas de besarlo, así que aprovecho su berrinche para callarlo con un beso. Intenta empujarme, pero no lo dejo separarse, gime quejándose, poco a poco se da por vencido.

-Mmmm...- gime derrotado al sentir mi mano deslizarse a lo largo de su espalda...

Me separo un poco para verlo a los ojos, los tiene entrecerrados, aún disfrutando del momento. Con esto se que todo estará bien, solo necesitamos aclarar todo, que no haya más secretos entre nosotros.

Lo tomo de la mano, eso lo hace reaccionar y abrir los ojos. Comienzo a caminar hacia la casa, ya no se resiste, simplemente camina detrás de mí. En cuanto entramos, cierro la puerta, me giro para verlo.

-Bien...- respiro hondo...- ahora puedes contarme sobre Kevin...- abre los ojos sorprendido

-¿Kevin?...-

-Si, Kevin...-

De inmediato se pone nervioso, yo sé la verdad, solo quiero que él me lo diga. Guarda silencio unos momentos. Respira hondo mientras voltea a ver el techo, puedo ver que las lágrimas se acumulan en sus ojos. Finalmente empieza a hablar.

-No tengo mucho que decir de él...- apretó los labios.- solo que tenía miedo de que te hiciera algo si descubría algo sobre ti.- voltea a verme.- de haber sabido quien eras, me habrías evitado muchos problemas.- frunce el ceño.- de pronto un día había ido a mi departamento, tomado todas mis cosas y las había llevado a un penthouse. Quería obligarme a estar con él, intenté negarme, pero necesitaba el trabajo, aún tengo que pagar mis estudios, y luego apareciste tu y...- me acerco a él y lo sujeto de los brazos, está hablando nervioso, desesperado, angustiado...

-Está bien...- lo detengo.- no tienes que decirme más, lo conozco.- ladea su cabeza...- lo conozco desde niños, se de su problema de creer poseer a quienes le gustan, y con lo lindo y hermoso que eres, era de esperarse que intentara algo así contigo...- se sonroja...

-Siwan...-

-¿Sí?...-

-¿En verdad no querías burlarte de mí?...- acaricio su rostro

-En verdad...- rodeo su cintura con mis brazos...- lo que más quería era poder tener tu corazón, pero al igual que a ti, todo se me complicó, lamento que hayas tenido que enterarte por Kevin, justo cuando estaba decidido a hablarte con la verdad.-

-¿Lo ibas a hacer?...- murmura haciendo un puchero

-Si.- respiro hondo...- acepto que fui yo quien tomó tus diseños, pero esperaba discutirlo contigo, darte una sorpresa, darte un pequeño empujón para que iniciaras tu propia empresa, tu carrera. Sabes que me encantan tus diseños, pensé que “ZE:A” debía tenerlos, pero aún no estaban aprobados, primero debía llevártelos y hablarlo contigo, al parecer llegaron a manos de Kevin antes de que pudiera hacerlo.-

-Estaba muy enojado...- murmura de nuevo...- creí que Kevin estaba intentando controlar también mis diseños, que por medio de ellos me obligaría a...- tapo su boca, no quiero hablar más de Kevin...

-Fui yo, golpéame si quieres, lo merezco por no haberte hablado con la verdad. Pero toma en cuenta de que lo hice porque te amo...- se me quedó viendo con un puchero...

-¿Me amas?...- sonrío

-Si, mucho...- lo beso en los labios, sonríe sobre mis labios

-Entonces....- se separa un poco...- supongo que sería muy malo si te golpeara, ¿no crees?...- sonríe coqueto

Oh cielos, como amo su hermosa sonrisa. Mi corazón se acelera de haber podido aclarar todos los malos entendidos, talvez aún quedan cosas que debemos decirnos, pero poco a poco. En estos momentos mi mente ha comenzado a desviarse.

Observo fijamente sus labios, poco a poco bajo la mirada para ver su cuello que me parece tan suculento en éste momento. Paso mi mano acariciándolo, preparándolo, lentamente me acerco hasta finalmente rozar mis labios.

-Siwan...- gime

-Kwanghee...- succiono la piel de su cuello, lo escucho gemir de nuevo.

-Aah... espera...- me empuja un poco, eso me sorprende, no puedo contenerme y me pide que me espere...

-¿Qué ocurre?...- su respiración está agitada, y sus mejillas sonrojadas...

- Tengo que decirte algo antes...-

Me pongo un poco tenso. Lo ha dicho muy serio, ¿acaso hay algo que no sé aún? ¿Será que no solo compartió departamento con Kevin, sino también su cama? Aprieto los puños con solo imaginar eso, pero intento tranquilizarme, si eso ocurrió estoy seguro que fue en contra de su voluntad.

-¿Qué cosa?...- pregunto ansioso... aprieta los labios, respira hondo... una leve sonrisa en sus labios aperece...

-Te amo Siwan...- me quedo viéndolo fijamente

Estoy un poco sorprendido, no porque no supiera que me amaba, sino por la seguridad y seriedad con que lo ha dicho, sobre todo después de la fuerte discusión que acabamos de pasar, el distanciamiento, el malentendido.

-¿Siwan?...- pasa su mano frente a mi rostro

-Oh!...- reacciono...

-Te he dicho que te amo, ¿no piensas decir nada?...- levanta una ceja indignado

-Claro que si...- sonrío y vuelvo acercarme a sus labios...- yo también te amo Kwanghee.-

Sonríe ampliamente antes de juntar nuestros labios y fundirnos en un maravilloso y ardiente beso.

Mi corazón late fuerte, casi al mismo tiempo que el de Kwanghee, el mismo que tuve miedo de perder, el que pensé que podría perderse en el corazón de otro, finalmente me doy cuenta de que no hay lugar ahí para nadie más, solo para mi.

FIN