Siwon (POV)
Abro los ojos, con el corazón
acelerado, me he despertado de pronto con el ruido de la televisión. Ya no hay
señal, solamente la estática con el volumen demasiado alto. Mi respiración está
agitada, llevo una mano a mi pecho hasta que los latidos de mi corazón se
regularizan.
Busco el control de la tele
para poder apagarla. Tanteo el mueble, por lo regular lo dejo a mi lado, vuelvo
a asustarme cuando en lugar de sentir la tela del tapizado, siento piel.
Acabo de recordar que no
estoy solo en casa, que ese chico, Heechul, esta aquí, que me quedé dormido
mientras veíamos la televisión. Siento el peso de su cabeza sobre mi hombro, me
muevo para girarme y verlo, eso provoca que el peso de su cuerpo se deslice,
contengo la respiración cuando su cabeza termina sobre mis piernas.
-Dios...- murmuro
No puedo decir nada más, dejo
escapar el aire y lo observo. Aprieto mis labios, paso saliva nervioso. En
verdad es hermoso. Su nariz, sus ojos, sus labios... todo su rostro es
bellísimo. Sacudo la cabeza cuando me descubro inclinándome hacia él, de
inmediato pego mi espalda al mueble.
Veo el reloj en mi mano.
-Las 3 de la mañana...- de
nuevo murmuro
Volteo para ver el mueble,
ahí está el control, junto a sus piernas. Lo alcanzo con una mano intentando no
moverme mucho para no despertarlo, apago la televisión y vuelvo a dejar el
control a un lado.
De nuevo me detengo un momento
a observarlo. Respiro hondo. Paso mis manos por debajo de su cuerpo, y poco a
poco me levanto del sillón con él en brazos. Vaya, es liviano, tiene razón Jung
Soo, necesita comer más.
Subo las escaleras con
cuidado de no hacer ruido, me detengo a mitad de camino cuando de pronto
balbucea, se mueve y pasa un brazo alrededor de mi cuello, eso deja demasiado
cerca su rostro del mío.
Mi corazón se acelera
nervioso, paso saliva con dificultad y continúo subiendo intentando no girar mi
rostro hacia el suyo. En el fondo estoy muriendo de ganas de hacerlo, pero si
eso pasa, estoy seguro de que terminaré rozando sus labios con los míos.
Demasiado tentador.
Lo dejo en mi habitación,
bajo las sábanas de mi cama. Antes de salir de la recámara me giro para darle una
última vista, quiero soñar con él...
-Sube...- le digo
Nos hemos despertado
temprano, quiero llevarlo a comprar un poco de ropa antes de ir al trabajo. Se
ha vestido de nuevo con lo que traía puesto cuando lo encontré en el jardín,
debo aceptarlo, a pesar de ser ropas muy coloridas y llamativas, le sientan
bien.
-¿Éste es tu auto?...- sonrío
-Si.-
-Wow!! .- abre los ojos
sorprendido en cuanto entra al garaje
-¿Te gusta?...- le pregunto
mientras camino hacia la puerta del copiloto, quitando la alarma
-Si, es muy bonito!...-
contesta rodeando el auto y pasando con cuidado su mano sobre él
-Es un Audi...- levanta el
rostro
-¿Un Audi? ¿No es un
auto?...- contengo mi risa, niego con la cabeza
-Si, lo es...- se me queda
viendo confundido...- olvídalo, sube...- vuelvo a decirle mientras abro la
puerta
-Bueno!...- sonríe y encoge
los hombros decidiendo olvidar su duda para subir al auto
Cierro la puerta, suspiro,
diablos!, el desconocer tantas cosas lo hace ingenuo e inocente, eso me
complica demasiado el asunto, no puedo alejar de mi cabeza la idea de tomarlo
por la cintura, abrazarlo y robarle un beso.
-Ponte el cinturón- le digo
en cuanto subo al carro, se me queda viendo.- el cinturón... – le repito
jalando el cinturón de seguridad de mi lado para que lo vea
-Oh!...- se gira para buscar
el suyo.- ¿éste?...- pregunta jalándolo
-Si, abróchalo.- asiente con
la cabeza
Enciendo el motor del auto
después de abrochar mi cinturón, pongo la reversa, y giro un poco mi cuerpo
para salir del garaje, me percato de que aún está investigando como se abrocha
el cinturón, pongo neutral.
-Es así...- le digo tomando
el cinturón de su mano, levanta la vista
Diablos!
Tiene las mejillas
sonrojadas, avergonzado por no haber podido abrochar su cinturón.
-Gracias...- murmura haciendo
una mueca, molesto con él mismo, sonrío por el pequeño berrinche
-¿Es la primera vez que te
subes a un auto?...- le pregunto para intentar tener una conversación con él
-Si...-
-¿Estas nervioso?...- veo que
está golpeando sus dedos en sus piernas
-No, ¿por qué?...- levanta
una ceja indignado
Definitivamente no le creo,
ese movimiento en sus dedos me hace ver que está nervioso, decido jugarle una
pequeña broma, meto la quinta y acelero de pronto haciendo rechinar las
llantas, de inmediato veo como se sostiene del asiento y el tablero del auto
dejando salir un pequeño grito. Desacelero y comienzo a reírme. Voltea a verme
con la boca abierta.
-Ttu... ¿lo hiciste a
propósito?!...- mi sonrisa se amplia...
-Creí que no estabas
nervioso...- aprieta los labios enojado, se ve tan lindo
-No lo estaba! Pero manejas
muy mal!...- se cruza de brazos y me voltea la cara haciendo berrinche
-Ya, ya... lo siento, fue una
pequeña broma...- hace una mueca, y una leve sonrisa se dibuja en su rostro
Lo he traído a un centro
comercial, con la variedad de tiendas que hay, debe haber alguna en donde pueda
encontrar ropa adecuada para él. Me detengo frente a una tienda, observo la
ropa puesta en el maniquí del aparador, me agrada.
-¿Te gusta?...- le señalo
-Los colores son muy
serios...-
-¿Por qué no te lo mides? Tal
vez se te ven bien esos colores...- hace una mueca, se encoge de hombros
-Está bien, es tu dinero...- sonrío ante su respuesta
desinteresada
En cuanto entramos noté como
el empleado que nos recibió se le quedaba viendo de forma despectiva,
afortunadamente parece que está demasiado acostumbrado a esas miradas porque no
hizo caso y siguió revisando la ropa colgada en toda la tienda hasta encontrar
varios conjuntos. Desafortunadamente a mí si me molesta que lo vean de esa
forma, y no pude evitar lanzarle una mirada de advertencia al joven empleado.
-¿Cómo me veo?...- abrió la
cortina de probador, con una mirada de desagrado
A mi me parece que se ve
mucho mejor, los pantalones de mezclilla, la camisa rosa, y el saco celeste le
sientan muy bien. Me acerco a él, sigue haciendo una mueca, pero al verme tan
cerca se sonroja. Acomodo su cabello para que no tape su cara, de nuevo doy
unos pasos hacia atrás para ver el cuadro completo.
-Hermoso...- contesto con una
sonrisa, una media sonrisa se dibuja en su rostro
-¿En serio?...- parece
avergonzado, pero empiezo a creer que más que eso es vanidoso y le agrada que
le diga que es lindo
-Si, muy hermoso, esos
colores te van muy bien...- sonríe de nuevo
-Gracias...- se da la vuelta
y vuelve a entrar al probador
Repetimos la misma escena
cuatro veces hasta que no supe cual de todos los conjuntos le quedaba mejor,
algo imposible, con todos se ve hermoso! Estamos parados frente a los cuatro
conjuntos observándolos fijamente, reflexionando, finalmente me doy por
vencido. Suspiro.
-Envuélvalos todos...- le
digo al empleado.
-Si señor.-
-¿Qué?! ¿Los vas a comprar
todos?...-
-Si, no logro decidirme por
uno, sería un desperdicio no comprar alguno.- le sonrío.- todos se te ven
demasiado bien...- de nuevo sus mejillas se han puesto rojas
-Gracias...- murmura...- pero
no debes hacerlo, no estaré mucho tiempo en tu casa, algún día tengo que
regresar y...- se queda callado
-¿qué cosa?...- hace una
mueca...
-Nada...- respira hondo...-
te espero afuera...- de pronto su rostro se ha puesto triste
No me agrada cuando su alegre
rostro se torna gris, triste, quisiera saber que es lo que ha pasado, ¿por qué
de pronto calla? Lo veo salir de la tienda hacia las bancas, respiro hondo sin
poder hacer nada. Me acerco a la caja para pasar la tarjeta y pagar la ropa.
Tardé un poco en pagar todo,
al parecer el empleado no solo era un grosero por la forma en que trató a
Heechul, sino que además era nuevo y cometió un error al cobrar, cuando salgo
de la tienda con los paquetes, el chico no esta en donde lo había visto
sentarse.
Volteo a ver a mi alrededor,
en realidad me altero un poco, ¿y si se le ha ocurrido irse? Dijo que algún día
tendría que hacerlo, pero ¿a dónde? ¿de nuevo con los gitanos?, mi corazón late
acelerado buscando por los alrededores del centro comercial.
Comienzo a caminar, entro en
algunas otras tiendas de ropa, pero no está, mi corazón está desbocándose, no
puedo creer que se haya ido. Aprieto las manos en puño sosteniendo los paquetes
de las compras.
Finalmente me quedo parado a
mitad del centro comercial, intentando dar una ultima mirada a los alrededores,
no lo veo. Respiro hondo, camino hacia los elevadores para ir al
estacionamiento. Aprieto el botón, de pronto una voz llama mi atención.
-Ven kity kity...- giro mi
rostro hacia donde lo escucho…- gatito, gatito…- abro los ojos sorprendido
-Heechul!!...- el chico está
en cuclillas junto a los elevadores, en el pasillo que va hacia los sanitarios
-Oh! ¿Terminaste?...- sonríe…
-Si. Diablos!...- suspiro
aliviado...- te estaba buscando.- ladea la cabeza confundido
-Lo siento...- gira de nuevo
hacia donde estaba viendo...- es que seguí a ese gatito, está bonito, ¿qué
estará haciendo en un centro comercial solito?... ven gatito, gatito...-
Me quedo observándolo
mientras intenta tomar al gato, hace ruidos lindos mientras lo llaman, se pone
de rodillas y su rostro se torna tierno intentando jugar con el felino. Dios!
Sacudo mi cabeza, de nuevo estoy pensando de más!
-Tenemos que irnos...- llamo
su atención...- tengo que ir al trabajo...- voltea a verme
-Pero...- hace un puchero...-
el gatito...- aprieta los labios, ve al animal...- adiós gatito...- se despide
se pone de pie...- ¿te ayudo?...- me dice extendiendo sus manos para tomar uno
de los paquetes
-No, estoy bien... anda sube
al elevador...- le señalo...
-Está bien...- murmura, de
nuevo voltea a ver al gatito
Oh rayos! ¿Por qué se me
parte el corazón verlo despedirse del gatito?! Entro al elevador antes de tomar
al animal y llevarlo con nosotros. No tengo tiempo de hacerme cargo de una
mascota, además, él mismo me lo ha dicho, tal vez se vaya y entonces ¿qué voy a
hacer con un gato?!
Ryeo Wook (POV)
-Tenemos que ir Hae…-
Jalo a mi primo de la mano,
intentando arrastrarlo conmigo, tenemos que estar juntos en esto. Ayer fuimos a
dejar mensajes en varias partes de la ciudad, debemos regresar para ver si
Chulie los encontró.
Donghae hace una mueca, baja
la mirada. Aprieto los labios, estoy molesto, no me gusta lo que está pasando,
Hae no quiere ir!.
-Hae!...-
-Lo siento Wookie, pero no
quiero que mis tíos se enteren y nos regañen por esto...-
Me le quedo viendo fijamente,
es un cobarde!
-Hae...- mi voz se quiebra,
me duele que no quiera ir- no puedes hacerle esto a Chullie...-
-¿Y si ese tipo nos vuelve a
molestar? ¿Sabes cuantas veces ha estado a punto de llamar a la policía?...-
hago una mueca
-No lo hará, solo está
amenazando, “perro que ladra no muerde”...- hace una mueca
-Pero yo lo he golpeado dos
veces Wookie... yo...- aprieta los labios...- no Wookie, mejor quedémonos
aquí...-
-Aaaarrg!! Me desesperas
Hae!!...- grito molesto...- está bien, sino quieres ir, no vengas! Yo puedo ir
solo a buscar a Chullie!...-
Me doy la vuelta y comienzo a
alejarme, me detengo de golpe y me giro a verlo.
-Ni se te ocurra decirle a mi
appá o mis tíos a donde fui...- frunzo el ceño molesto
-No...- murmura agachando la
mirada
De nuevo comienzo a caminar
molesto entre los remolques, algunos gitanos se me quedan viendo, puedo notar como
algunos empiezan a murmurar en cuanto me ven, me les quedo viendo fijamente
hasta que se intimidan y se dan la vuelta.
-Ridículos...- murmuro
enojado
Como si ellos fueran
perfectos, se creen con el derecho de juzgarnos sin conocer la verdad, ni siquiera
nos han preguntado si es cierto lo que dicen, aunque de haberlo hecho,
seguramente no nos creerían, tal y como hizo el tío con Chullie.
Sigo caminando distraído,
sosteniéndoles la mirada a todo el que se cruza en mi camino, doy la vuelta en
un remolque cuando siento que alguien me jala del brazo, me tapa la boca y me
arrastra hasta un rincón apartado. Empiezo a patalear cuando veo impedido para
gritar.
-Lo siento Wookie...- me
murmura en el oído...- es que necesito hablar contigo...- me giro de prisa
-Mimi!!!...- me abrazo a
él...- te extraño mucho...- el abrazo se prolonga por un largo rato, teníamos
más de una semana sin vernos
-Yo también Wookie...- nos
separamos finalmente, veo a mi alrededor un poco extrañado
-¿Por qué nos escondemos?...-
Mimi agacha la mirada.- ¿qué pasa?...- hace una mueca
-Es solo que no quiero que
Hanie se entere...- murmura
Frunzo el ceño, Mimi parece
apenado de tener que decirme eso. Estoy a punto de decir algo, pero me detengo
al recordar las habladurías y el hecho de que Zhou Mi ahora está casado.
Aprieto los labios, respiro hondo.
- Te has enterado...-
-Si... Hanie me lo dijo...-
levanta la mirada...- ¿has sabido algo de Chullie? ¿se va a casar?...- niego
con la cabeza
-No sé. – suspiro...- el tío
lo encerró en su remolque, pero hace dos días escapó, ¿no te lo dijo Hangeng?-
-Dios! No!...-hago una mueca
-No sabemos a donde fue, los
tíos lo andan buscando...-
-Tal vez...- sonrío
-Si, lo sé, Hae y yo fuimos a
dejar mensajes por todos los lugares, espero que los lea, ahora iré de nuevo a
la ciudad.- suspira, de nuevo hace una mueca triste
-Ojala pudiera
acompañarte...- se me queda viendo...- pero no puedo...- sonrío
-Entiendo Mimi, no te
preocupes...- intento sonreír para que no se ponga triste, lo conozco debe
estar desesperado por estar con nosotros.- ahora tengo que irme antes de que
alguien me vea.-
-Está bien...- me vuelve a
abrazar...- te quiero Wookie...-
-Y yo a ti... anda, vete, que
de seguro aún tienes que quemar algún pedazo de carne para Hangeng.- hace un
puchero
-Ya no los quemo...- sonrío
-Adiós Mimi...- me despido y
vuelvo a correr para ir a la ciudad
Tomo el mismo camino,
revisando todos y cada uno de los lugares en donde escribimos mensajes, todos
siguen igual excepto el que puse en el buzón de la casa bonita, hago una mueca,
de seguro la borro el tipo malhumorado. Debí traer de nuevo el gis.
Es la primera vez que vengo a
la ciudad solo, estoy un poco nervioso, la gente no deja de verme, creo que no
paso para nada desapercibido, empiezo a preocuparme porque mis tíos se enteren
de que estuve aquí.
Pero ya estoy en la ciudad,
no puedo dar marcha atrás, sigo caminando por las calles, revisando cada uno de
los mensajes, ninguno tiene respuesta, eso me desilusiona un poco, y al mismo
tiempo me preocupa, ¿en donde estará Chulie?
Y otra vez, como siempre de
distraído cruzo la calle para ir a la fuente del parque, sin fijarme, solo el
rechinido de unas llantas me hacen reaccionar, darme cuenta de que estoy a
mitad de la avenida. Me giro para intentar regresar, pero es demasiado tarde.
Recibo el golpe en mi costado
izquierdo, que me hace elevarme un poco y caer en el pavimento, me he dado un
golpe fuerte en la cabeza, me quedo en shock, mi respiración se hace pesada,
escuchando los gritos de la gente a mi alrededor. Fijo mi vista hacia el
cieelo, creo que voy morir, si voy a hacerlo quiero ir ahí, a las nubes.
Mis ojos comienzan a
cerrarse, de pronto algo me tapa las nubes, un rostro.
-Oh rayos! No otra vez!...-
escucho a alguien exclamar a lo lejos
No sé quien sea, mis ojos se
han cerrado antes de poder verlo con claridad.
HeeChul (POV)
Siwon, así me dijo que se
llamaba el tipo guapo que vive aquí, me trajo de regreso a su casa. Estoy un
poco preocupado por todo esto. En
verdad me cae muy bien, es muy simpático, y además muy guapo, pero no entiendo
porque me está ayudando, ni siquiera me conoce.
Dejo los paquetes en la cama
y me dejo caer de espaldas, suspiro, recuerdo haberlo visto antes, es el señor
que nos defendió del tipo grosero que vive en la casa de a lado, parece buena
persona. Además me compró ropa!. Me siento y empiezo a abrir los paquetes.
-Es linda...- murmuro sacando
las prendas
Comienzo a extenderlas todas
en la cama, estoy emocionado, nunca había comprado tantas cosas en un solo día!
Quiero ponérmelas todas! Volteo a ver a mi alrededor
-oh vamos! Estoy solo! – me
digo a mi mismo mientras comienzo a quitarme la ropa
Me quedo solo en ropa
interior, me veo en el espejo, sonrío satisfecho con lo bien que me veo, me
giro para tomar uno de los pantalones nuevos y me los pongo, de nuevo me veo al
espejo, girándome un poco para verme el trasero.
-Eres sexy Chullie!...- me digo al espejo
Sonrío por las tonterías que
me digo, y de nuevo voy a la cama, tomo una camisa, me la pongo, es uno de los
conjuntos completos. Me subo a la cama para verme completo en el espejo del
tocador. La cama se mueve mucho, me agrada, y de nuevo empiezo a brincar sobre
ella.
Sin
dejar de saltar en la cama, me quito la ropa de nuevo y me pongo otro de los
conjuntos, así lo hago con todos hasta que me pongo el último. Jamás pensé usar
solo dos o tres colores en mi ropa. Veo el chaleco que me quité, ya no me
parece tan lindo como antes.
Estoy
feliz con la ropa nueva, levanto un poco la solapa de la camisa y la huelo.
-Huele
a nuevo...- murmuro y vuelvo a olerla
Recuerdo
que no debo acostumbrarme a éstas cosas, no voy a quedarme mucho tiempo,
respiro hondo y bajo de la cama, camino descalzo hasta la ventana, hay muchos
árboles que tapan la vista, aún así, me sonrojo y me hago a un lado cuando veo
a una persona en la ventana de la casa de enfrente viendo directamente en mi
dirección.
Diablos!
¿Me ha visto? ¿Ha visto cuando estuve cambiándome de ropa?! Mi corazón late
deprisa ante esa posibilidad, mi padre ya me hubiera regañado por esto. Aprieto
los labios. Respiro hondo intentando tranquilizarme.
-No
creo, hay muchas ramas, es imposible que haya visto algo...- me digo intentando
convencerme...
Aún
así, me agacho y a gatas voy hacia la
cama, tomo un conjunto mas sencillo, y así me voy al baño a cambiarme. Jamás
vuelvo a quitarme la ropa en la habitación!
Mi
estómago empieza a rugir de hambre, no sé que hora sea, pero necesito algo de
alimento. Bajo las escaleras hasta la cocina. Abro la puerta del refrigerador y
me quedo observándolo. No hay nada! Estaría vacío sino fuera por unas manzanas
y un envase de leche.
Aprieto
los labios, mi estomago vuelve a rugir. Empiezo a buscar por las alacenas, he
logrado encontrar una lata de frijoles, otra de sopa instantánea, algunas
verduras enlatadas, un poco de atún y galletas.
Todo
está sobre la repisa de la cocina, lo observo, suspiro, tengo hambre, tendré
que conformarme con esto, no puedo salir de la casa, y como no sé como encender
esa estufa, me decido por el atún y las galletas.
Estoy
aburrido, no sé cuanto tiempo ha pasado, pero estar solo en ésta casa tan
grande no es lindo, extraño a mis primos, si ellos estuvieran aquí, estaríamos
viendo la televisión y riéndonos de los chistes simples. O tal vez Wookie
habría preparado una rica comida. Suspiro mientras llevo un poco de atún a mi
boca.
Sonrío
al recordar al gatito del centro comercial, de seguro a él si le gustaría el
atún que me estoy comiendo, tan desabrido. Pobrecito, ¿por qué lo habrán dejado
ahí? Definitivamente hay gachés malos, ¿cómo se atreven a dejar a un indefenso
animalito en un lugar así? Además los gatos son puros, deberían protegerlos.
Hago un puchero molesto. Vuelvo a suspirar, me da pena el gatito.
Vuelvo
a tomar el cubierto y a comer un poco de atún, ahora me sabe peor, tan solo
imaginarme que el animalito no tiene que comer, me hace querer llorar. No pude
terminarme la comida, lavé el plato, extendí un trapo y lo dejé secándose sobre
la encimera. Siwon no tiene donde
ponerlos a secar frunzo el ceño.
Estiro
los brazos bostezando. Diablos! Estoy muy aburrido!! Jamás he podido estar
encerrado sin hacer nada, por eso escapé del remolque, además de que no quiero
casarme con Ki Suk. Me siento en la sala.
-¿Cómo
encendió la tele?...- me acerco al televisor a gatas buscando un botón o algo.-
rayos! ¿porqué tiene cosas tan extrañas en su casa?...- suspiro molesto
Empiezo
a buscar a mi alrededor el aparatito con el que encendió la televisión anoche,
estoy buscando debajo del mueble cuando escucho que la puerta principal se
abre. Me incorporo un poco para ver por encima del respaldo del sillón. Llegó!
-Siwon!...-
sonrío
-Ah!
Hola Heechul...- se me queda viendo...- ¿qué haces?...- me pregunta mientras
deja su saco a un lado
-Busco
el aparato con el que encendiste la tele.-
-¿El
control?...-
-Si,
eso!...- pone la caja que trae en sus manos en el sillón, busca entre los
cojines de éste y saca el control
-Aquí
está...-
-Gracias...-
sonrío, la caja que ha dejado en el mueble llama mi atención porque de pronto se
mueve...- ¿qué traes ahí?...- pregunto un poco asustado
-Ah!...-
sonríe...- algo que tal vez te guste...- ladeo la cabeza
-¿A
mí?...- se acerca y abre la caja
-Si,
a ti...- abro los ojos sorprendido cuando veo que saca al gatito del centro
comercial
No sé
que decir, estoy muy emocionado, ha traído al gatito! Lo tomo en mis brazos,
empiezo a acariciarlo, el gatito no deja de maullar, estoy sonriendo mucho,
estoy feliz. Volteo a ver a Siwon.
-Gracias...-
mi corazón está latiendo muy deprisa, no puedo creer que lo ha traído
-De
nada...- se acerca para acariciarlo...- creo que podría hacerte compañía,
debiste estar muy aburrido aquí solo...- muerdo mi labio inferior
-Si,
un poco...- bajo la mirada para ver al gatito...- hola gatito bonito...-
-Tienes
que ponerle nombre, no puedes seguir diciéndole “gatito”.- levanto la mirada
-Mmmm...
¿cómo le pondrías tu?...-
-Hee...-
-¿Cómo
yo?...- sonríe
-Si...-
sonrío un poco apenado
-Yo
le pondría como mi tío que en paz descanse, era mi tío favorito... Bum...-
-¿Qué
tal Heebum?....- abro los ojos sorprendido
-Si!
Eso suena perfecto...- vuelvo a ver al gatito...- ¿Te gusta Heebum?- el gato
simplemente maulla...
Creo
que tiene hambre, Siwon tiene muchas latas de atún, la daré eso de comer, corro
a la cocina con Heebum en mis brazos, lo pongo sobre la encimera mientras busco
una de las latas, le pongo el plato con comida en frente y de inmediato
comienza a comer, pobrecito tenía mucha hambre.
1 Comentarios
Pobre siwon tiene a la tentacion en sus brazos y no puede hacer nada jajaajaj que bueno.....hahaha
ResponderEliminarwookie tan lindo buscando a chul y hae con sus miedos,wookie como que es mas desidido,bueno con los problemas de hae es comprensible,lo que menos quiere es que lo obliguen a hacer algo que no quiere.
vaya forma del destino (mas bien de mew) por la situacion en las que yesung y wook se conocen jajajaj un dia moriran del susto alguno de los dos.
Omo,quien vio a la chula,bueno mejor dicho.....lo vio???
la duda del dia