Inesperado... Capitulo 51

Kevin (POV)

-Ok, después de que se baten todos los ingredientes, ¿qué más se hace?.-

-Pones un sartén en la estufa con un poco de mantequilla.-

-¿Y luego?- sonrío

A veces me pregunto como mi hermano pudo casarse con éste chico, no sabe hacer nada; pero luego veo como se esfuerza por complacerlo y en aprender que no puedo más que entender porque Hyun Joong lo quiere tanto.

Termino de explicarle como se hacen las tortas de huevo que tanto le gustan a mi hermano, él ha anotado todo en su libreta y está guardando su bolígrafo dentro de su lapicera.

-Saeng, ¿en verdad quieres mucho a mi hermano?.- voltea a verme

-Si, mucho.- se sonroja

-Mi hermano te adora, nunca había visto que fuera tan protector con alguien, ni siquiera conmigo.- hago un puchero- ya ves ni siquiera se ha enterado de que terminé con Ki Bum.-

-Pero si no estas triste, ya estas saliendo con ese otro chico ¿no?.- sonrío

-Si, tienes razón.- suspiro.- Eli es un buen chico a pesar de que parece todo lo contrario.-

-Oye, ¿y no te da miedo subirte a esa moto?.- sonrío de nuevo

-Al principio si, pero ahora ya me acostumbré, además Eli siempre es muy precavido.-

Sigo platicando con Saeng un rato más, es casi de mi edad así que nos estamos empezando a llevar muy bien. En realidad no es como pensé que era, a veces si tiene sus ataques de niño mimado, pero he aprendido a entender que no es más que un mecanismo de defensa cuando se siente amenazado, o cuando siente que no podrá hacer algo.

Estamos riéndonos de los lapsos en que mi hermano dice o hace cosas un poco extrañas, cuando siento que alguien está detrás de mi, Saeng levanta la vista y se queda viendo a la persona detrás de mí con el ceño fruncido. Volteo para ver de quien se trata.

-Hola Kevin.- ruedo los ojos al ver que es Ki Bum

-¿Qué haces aquí?.-

-Yo, necesito hablar contigo.-

-Yo no. – le contesto tajante.- yo no necesito nada de ti.- aprieta los labios, respira hondo

-Se que no necesitas nada, pero...- el sonido de mi celular interrumpe su diálogo

Saco mi celular de mi mochila, sonrío al ver que es Eli, volteo a ver a Saeng.

-Te veo cuando terminen las clases Saeng.-

-Si, claro.- recoge sus cosas y se aleja

Volteo a ver a Ki Bum que sigue parado frente a mí. No sé que es lo que quiera, pero la última vez que lo vi, las cosas no fueron muy bien, terminó golpeando a Eli, y eso en verdad me hizo enojar; no entiendo que es lo que pretende. Mi celular sigue sonando y con eso decido ignorarlo. Me doy la vuelta al mismo tiempo que contesto la llamada.

-Holaaaa.-

-Hola hermoso, ¿estas ocupado?.- sonrío

-Tengo una hora libre, ¿y tú?.-

-Que casualidad! Yo también tengo una hora libre.- río un poco.- y precisamente se me ocurrió venir por ti.- la sonrisa se me borra, estoy sorprendido

-¿Cómo?.-

-Voltea a tu derecha...- abro la boca sorprendido y volteo hacia donde me ha dicho

-ELI!!.- sonrío cuando lo veo recargado en un muro con el celular en su oído.- Eli!!.- corro para abrazarlo

Eli extiende sus brazos cuando estoy a punto de llegar a él, estoy emocionado de verlo, me gusta cuando hace éste tipo de cosas, cuando me da sorpresas, me impulso un poco y me cuelgo de su cuello, él me recibe y me ayuda a brincar para enredar mis piernas alrededor de sus caderas.

-Eli...- le digo muy cerca de sus labios.

-Hola Kevin.- me da un beso suave en los labios

-¿Qué haces aquí? Tu escuela está un poco lejos.- sigo trepado sobre él

-Quería verte, de todos modos el resto de las clases se suspendieron por un corto circuito que dejó sin luz a toda la universidad.- contesta.- así que, ¿a dónde quieres ir?.- sonrío

-Mmmm...- comienzo a pensar.- no sé, se me antoja una malteada de chocolate.-

-Uuuuh... eso suena delicioso, entonces que sea malteada de chocolate.-

-Eeeeh!!.- me bajo y empiezo a aplaudir mientras regreso a la banca en la que estaba por mis cuadernos

Estoy levantando mis libretas cuando recuerdo que Ki Bum estaba ahí hace unos minutos, volteo a todos lados, pero ya no lo veo. Respiro hondo. Creo que vio todo, pero no puedo hacer nada, él y yo ya no somos nada; y Eli está comenzando a ser muy importante para mí.

Hyung Joon (POV)

Kang Min está sobre la cama jugando con sus pies, con su chupeta en la boca; lo acabo de bañar, le he puesto un trajecito muy lindo que acabo de comprarle, está creciendo muy rápido.

Es fin de semana, Jung Min vendrá a verlo como lo ha hecho desde hace dos semanas, desde que los papeles del divorcio fueron firmados.

Respiro hondo, llevo una mano a mi abdomen, bajo la mirada para verme. Aún no puedo creer que de nuevo tengo un bebé aquí. Sonrío acariciando mi casi imperceptible pancita, apenas tengo poco más dos meses, de hecho sino fuera porque no me queda la ropa, nadie lo notaría. 

Me paro frente al espejo para seguir viéndome, me pongo de perfil mientras levanto mi playera, de nuevo sonrío, aunque estoy un poco preocupado porque de nuevo tendré que dejar mis estudios, estoy emocionado.

Es diferente a la primera vez, tenía miedo y me sentía el chico más desafortunado sobre la tierra; volteo a ver a Kang Min.

-Pero eres lo más hermoso que me ha pasado Kangminie, nunca lo olvides.- le digo, aunque sé que no me entiende

Escucho el timbre de la puerta, doy un brinco sorprendido, veo el reloj colgado en mi habitación. Se me ha hecho tarde!

-Cielos! ¿Qué me pongo?!.- abro el closet apurado

Me quedo parado viendo fijamente mi ropa, hago un puchero al darme cuenta de que toda la ropa bonita que tengo no me quedará; respiro hondo resignado y tomo unos pantalones que siempre me han quedado grandes y un suéter holgado.

-Joonie! Jung Minie está aquí!.- escucho a mamá gritar

Rápido me pongo la ropa, me peino frente al espejo y rocío un poco de loción sobre mí, muerdo mi labio al verme al espejo. No me gusta ésta ropa, suspiro, a Jung Min no le va a gustar, hago un puchero.

Tan pronto como pienso eso, frunzo el ceño.

-¿Y qué si no le gusta Joon?.- me digo al espejo.- ash!.- me volteo para ir por Kang Min- vamos bebé, papá ha llegado.- le digo mientras lo cargo.

Tomo la pañalera y salgo de la habitación. Jung Min está en la sala sentado, platicando con mamá. Me pongo un poco nervioso cuando veo que junto a él está un enorme oso de peluche, y en sus piernas un ramo de flores. Mis mejillas se sienten calientes.

-Hola...- saludo

-Hola!.- Jung Min se pone de pie con el ramo en una mano

-Bueno, yo voy a despertar a Ki Bum, últimamente batallo más.- dice mamá excusándose para dejarnos solos

-Si, gracias señora Kim.- Min le hace una venia

Aprieto los labios nervioso, Jung Min siempre logra ponerme nervioso cuando se me queda viendo fijamente. Se acerca, toma a Kang Min en sus brazos y le da un beso. Voltea hacia mí, extiende su brazo con las flores.

-Te traje esto...- me dice.- espero que te gusten.-

-Gracias.- oh rayos! Me siento muy avergonzado.

Tomo las flores, las veo  un momento, son muy lindas, me hacen sonreír; mi corazón se acelera al ver que tienen una nota pegada. La abro sin sacarla por completo, mis mejillas se calientan más cuando leo el mensajito.

“Para mi hermoso bebé que me ha hecho el hombre más feliz, otra vez”

Siento la mirada de Jung Min sobre mí, pero no puedo verlo a los ojos, en verdad estoy muy apenado, nervioso; veo un jarrón cerca de la mesa, lo tomo para poner las flores en él, necesito tranquilizarme. Respiro hondo varias veces.

Regreso a la sala, Min sigue parado cargando a Kang Min. Volteo al sillón, veo el oso de peluche, frunzo el ceño.

-¿No crees que es muy grande para Kang Min?.- le digo

-¿Quién dijo que es para él?.- levanto las cejas sorprendido

-¿Entonces?.- ladeo la cabeza

-Es para ti...- se acerca, sujeta mi cabeza y me da un beso en la mejilla.- para que tengas algo que abrazar cuando duermes.- me dice casi en el oído

Abro los ojos sorprendido, de nuevo siento mis mejillas calientes.

-Tonto!!.- lo empujo

Se empieza a reír por mi reacción, mi corazón sigue latiendo muy rápido. ¿Es así como se supone que debe sentirse uno cuando le gusta un chico? Me le quedo viendo mientras él sigue riéndose de mí, jugando de Kang Min.

-¿Vienes con nosotros?.- de pronto voltea para preguntarme.- iremos al parque un rato.-

-Si tu quieres...- contesto

-Claro que quiero!!.- sonríe.- vamos!! Te compraré un helado.- sonrío

-Bien, pero que sea enorme.-

-Por su puesto, lo que sea para mis bebés.- de nuevo se acerca y me da un beso en la mejilla

Cada vez que lo hace deja a mi corazón latiendo muy rápido. Me avergüenza aceptarlo pero me pone tan nervioso que me vuelvo un poco torpe. Tomo de nuevo la pañalera y la cuelgo en mi hombro, camino hacia la puerta para tomar la carreola.

-Oye!! Deja eso!! .- doy un brinco al escucharlo hablar fuerte

-¿Por qué?.-

-No cargues nada...- me arrebata la carreola, y luego la pañalera, frunzo el ceño

-Entonces dame al niño, lo vas a tirar.-

-No, no puedes cargar nada, mejor abre la puerta.- ruedo los ojos

-Está bien.-

Hago lo que me dice con cara de fastidio, pero no puedo evitar sonreír en cuanto me da la espalda, sus cuidados por excesivos que sean me hacen sentir importante, querido, amado.

Kang Min está en su carreola, me inclino un poco para taparlo del sol y darle un poco de agua. Estoy sentado en una banca del parque esperando a Jung Min que ha ido a comprar el helado que me prometió.

Me le quedo viendo a mi bebé, cada vez que lo veo no puedo dejar de sonreír, se parece mucho a Minie, y en éstos momentos eso me hace aún más feliz que antes, Jung Min se ha portado muy bien conmigo a pesar de que estamos divorciados. Empiezo a entender a la gente adulta cuando dice que se sienten como un colegial enamorado, creo que así es como me siento yo.

Pongo el chupón en la boca de Kang Min, me quedo viendo fijamente mi mano, el dedo en donde estuvo el anillo de matrimonio, acerco mis manos, paso mis dedos sobre la marca que dejó el aro. A veces me siento un tonto por haberle pedido el divorcio, pero al final siempre termino pensando que si no lo hubiera hecho, no estaría sintiéndome como lo hago ahora.

-Helado de fresa para el jovencito...- levanto la vista al escucharlo

-Gracias.- sonrío tomando el helado

-De nada.- se sienta a mi lado.- oh se está durmiendo! Oye! Kang Min! se supone que estás paseando con tu papá!.-

-Shh... no hagas eso...- lo regaño.- no seas malo.- hace una mueca

-Bueno, solo porque así puedo estar a solas con tu appá te perdono que te duermas en pleno paseo.- le dice al niño que ya esta dormido

Es un tonto, pero me hace reír con sus tonterías. Tomo un poco de helado del vaso. Voltea a verme.

-¿Cómo te ha ido en la universidad?.-

-Bien, la próxima semana empiezan los exámenes finales.-

-Oh! Entonces tendrás que estudiar mucho.- asiento con la cabeza.- pero no te desveles mucho bebé, tienes que descansar.- lleva su mano a mi abdomen.- recuerda que traes a nuestro bebito y eso consume más de tus energías.- sonrío, siempre hace ese tipo de cosas que hacen que mi corazón se derrita.

Respiro hondo, no lo aguanto más, dejo el vaso de nieve a un lado y me abrazo a él recargando mi cabeza en su hombro.

-Lo sé Jung Min, voy a cuidarme.- murmuro

Cierro los ojos, respiro hondo inhalando su olor. Me gusta su loción. Me jala más hacia él haciendo que me siente en una de sus piernas, me siento un poco apenado porque estamos en un parque, así que escondo mi rostro en su hombro.

-Bebé...-

-Mmm...- contesto sin separarme de él

-¿Puedo hacerte una pregunta? Pero quiero que la contestes sinceramente.- abro un poco mis ojos, no quiero separarme de él, así que vuelvo a cerrarlos y contesto

-Si, contestaré sinceramente.- siento sus manos en mi espalda sosteniéndome

-Bien.- hace una pausa.- ésta vez quiero hacer las cosas en el orden correcto, aunque creo que alguien se nos adelantó.- supongo que habla de mi embarazo al decir que alguien se nos adelantó.

-Tu tuviste la culpa, nunca usas protección.- contesto sin despegarme de él, se ríe

-¿Yo como iba a saber que no soy un Park normal?.-

-Cualquiera sabe que no eres normal.-

-Oye!.- empiezo a reírme

-Tch! Solo porque ahora no puedes defenderte sino ya te hubiera dado unas nalgadas por contestón!.-

-Ya, dime que es lo que ibas a preguntarme.- levanto un poco la cabeza para verlo a los ojos...

 Hyun Joong (POV)

-Saengie!.- grito desde la puerta en cuanto llego a casa.- llegué! ¿quieres salir a comer fuera? ¿o prefieres que preparemos algo juntos?!.- pregunto mientras dejo mi portafolio en la mesa

Frunzo el ceño al no recibir respuesta, quito mi chaqueta y la dejo a un lado. Camino hasta la cocina, levanto las cejas sorprendido cuando veo que hay muchos trastes sucios en el fregadero, eso es extraño, Kevin nunca sale de casa sin dejar la cocina limpia.

-¿Sangie?!.- sigo buscándolo

No recibo respuesta, no creo que no haya llegado aún a casa así que subo las escaleras hasta las habitaciones, toco a la puerta de Kevin pero no está; ese niño últimamente ya no me dice cuando va a salir! Respiro hondo, en fin, ya pronto tendrá 18 años y no puedo seguir tratándolo como si fuera un niño.

Abro la puerta de nuestra habitación, de inmediato un rico olor invade mi nariz, me detengo a inhalar profundo cerrando los ojos unos momentos. Sonrío, huele delicioso, y más sonrío cuando veo que en medio de la habitación en la alfombra, hay dos enormes cojines y en medio una charola con dos platos servidos de mi platillo favorito.

-Oh! Hyun!!.- volteo hacia la puerta del baño.- Noo! Se supone que debías entrar con los ojos cubiertos!!.- hace un puchero

-Oh! Lo siento! Es que no contestabas y subí a buscarte.- se sienta en la cama con el puchero en sus labios

-No es justo, se supone que era una sorpresa por tu cumpleaños.-

-¿Es mi cumpleaños?.- eso que me sorprende, no lo recordaba

-Si, es tu cumpleaños.-

Sigue con el puchero, me causa un poco de gracia, pero aún así no me gusta verlo así, debió esforzarse mucho; me tapo los ojos y me doy la vuelta, a tientas busco la puerta para salir.

-No sé de que hablas, yo apenas estoy subiendo las escaleras.- le digo, empieza a reírse cuando al abrir la puerta me doy un golpe en la frente.- aush!-

-Cuidado Hyun...- me abraza y me da un beso en la frente, pero aún así me hace salir de la habitación, se escucha emocionado.- Espera aquí!.-

Tras unos momentos la puerta se vuelve a abrir, antes de que pueda reaccionar pone una pañoleta en mis ojos para que no pueda ver nada. Creo que soy un poquito pervertido, porque solo con imaginarme lo que pueda pasar ya me siento un poco “emocionado”.

-Hyun!!.- me dice dándome un manotazo, estaba intentando manosearlo pero me lo impide

-Aush!.-

-Quédate quieto...- respiro hondo

-Está bien...- contesto

Me hace caminar hasta donde están los cojines para después sentarme sobre uno de ellos, estoy ansioso, no puedo dejar de sonreír. Puedo sentir que se sienta junto a mí, escucho como mueve los cubiertos.

-Abre la boca...- me dice

-¿Por qué? ¿Qué me vas a hacer?.- bromeo un poco

-Ya Hyun!.- me río un poco

-Está bien... aaaah.- abro la boca y de inmediato pone un poco de comida

Oh cielos! Es la torta de huevo más rica que he comido en toda mi vida!

-¿Te gustó?.- pregunta

-Es deliciosa, ¿en dónde la compraste?.-

-No la compre, yo la cociné.- eso si que no me lo esperaba, me quito la venda de los ojos

-¿Qué? ¿Tu lo cocinaste?- tiene sus mejillas sonrojadas

-Kevin me dijo como...- se voltea un poco y toma una libreta.- anoté todos los pasos aquí.- me dice enseñándome una hoja

No puedo cerrar la boca de lo sorprendido que estoy, esto en verdad sabe increíblemente delicioso! Tomo un poco más, o más bien me retaco la boca con la comida.

-Diablos Saengie, te aseguro que jamás voy a dejarte.- le digo con la boca llena

-¿En verdad te gusto?.- volteo a verlo, me paso la comida con dificultad, me acerco y le doy un beso

-Si, está delicioso Saengie, gracias.- y de nuevo sonríe, se le forman esos hoyuelos en sus mejillas, tan tiernos

Sigo sentado en la alfombra, me recargo en la cama, respiro hondo con dificultad, comí demasiado, estoy muy lleno. Creo que tengo cara de empachado, pero es que no podía dejar de comer todo lo que ponía frente a mí. Saengie levanta los platos y los lleva al baño, sonrío al ver como ha cambiado en tan poco tiempo, estoy orgulloso de él.

Cierro los ojos unos momentos, con tanta comida me está dando un poco de sueño, mis respiraciones se empiezan a hacer lentas.

-Hyun...- escucho su voz

Enderezo la cabeza y abro los ojos.

-Oh Dios...- me quedo con la boca abierta

-¿Te vas a dormir?.- me pregunta con un puchero

-NO, NO, ¿Quién dijo eso?!!...- contesto de inmediato y me enderezo por completo

Ni loco me duermo en éstos momentos!! Mi Saengie está parado en la puerta del baño completamente desnudo!!! Mi corazón se a acelerado, y ni que decir de mi amiguito que está comenzando a reaccionar con semejante visión.

-Es que como vi tus ojos cerrados...-

-Solo descansaba la vista.- contesto rápido, de nuevo una sonrisa en sus labios

-Entonces... ¿quieres jugar?.-

-SIII! Si quiero!!.-

-Bueno, entonces ponte la venda de nuevo.- frunzo el ceño

-No, ¿porqué?.- le digo un poco desilusionado, yo quiero seguir viéndolo

-Anda es parte del juego...-

Respiro hondo, hago una mueca de inconformidad, busco la pañoleta y la vuelvo a amarrar cubriendo mis ojos. Me quedo en total silencio, quiero escuchar lo que hace, pero de pronto él también ha dejado de hacer ruido.

Hasta que siento un liguero cosquilleo en mi oído el cual me eriza la piel y llega hasta mi pene haciéndome mover un poco mis caderas ante la necesidad.

El cosquilleo recorre mi cuello, intento no moverme, pero me está resultando imposible, quiero voltearme, sujetar a Saeng y hacerle el amor rápido! Pero hago todo lo posible por disfrutar el momento tal y como él quiere.

Pasa unos segundos con lo que supongo es una pluma acariciando mi cuello y mis oídos, se vuelve a detener, de pronto siento sus manos desabrochando los botones de mi camisa, estiro mis manos para tocarlo, pero las sujeta y las pone a un lado. Para más tortura usa mis caderas para sentarse frente a mí.

-Saeng...- me quejo gimiendo al sentirlo sobre mi cada vez más despierto pene

-Ssshhh... – me chista al oído

Sus manos tocan con suavidad mi pecho, dejo caer mi cabeza hacia atrás en el colchón de la cama, muevo mis caderas de nuevo con la ansiedad de sentir más cuando usa la pluma para acariciar mis pezones.

-cielos...- murmuro cuando sus labios tocan mi pecho- Saeng... por favor...- le pido que me deje tocarlo

No contesta, simplemente toma una de mis manos y la pone sobre su pene, aprieto los labios al sentirlo duro, lentamente comienzo a masturbarlo mientras él sigue atendiendo mis pezones hasta que están completamente duros al igual que mi eje.

Se desliza hacia atrás, no puedo verlo, pero puedo imaginármelo de rodillas inclinado hacia mí porque está desabrochando mis pantalones. Levanto un poco las caderas para que baje mi ropa, estoy ansioso, pero mi espera termina cuando sus labios tocan mi ingle, muy cerca de mi pene.

-Nnnhhh...- sujeto su rostro con mis manos, quiero guiarlo a donde necesito atención.- rayos...- su lengua toca la punta

Juguetea un poco, haciéndome desear más, su lengua recorre mi pene con suavidad, sin prisa, quiero quitarme la venda para ver su rostro,  pero debo aceptar que no ver también está agregando un plus.

Aprieto mis manos en su cabello cuando su boca finalmente toma por completo mi eje, y tan rápido como lo hace lo vuelve a sacar, repite la acción varias veces haciéndome gemir del placer.

-Saeng... oh Dios, Saeeeng...- aprieto más mis manos para que se detenga.- quiero...- saca mi pene de su boca, se quita de en medio

Me ha dejado un poco confundido, pero de nuevo la ansiedad regresa cuando sus manos deslizan un condón en mi pene erecto. Se pone a horcajadas sobre mi, mis manos rápido buscan su entrada, quiero prepararlo.

-¿Saeng?!.- me sorprendo al sentir lubricante en su entrada...- tu... ¿te preparaste solo?.-

-Ssh, ya cállate Hyun, que me quitas la concentración.- sonrío

-Está bien, está bien, continúa.-

Apenas he dicho eso cuando su mano toma mi erección y la pone en su agujero, lentamente empieza a sentarse, puedo sentir el calor poco a poco rodeando mi eje, apretado, realmente abrumador.

Sujeto sus caderas para ayudarlo con el ritmo que él solo empieza a tomar, muerdo mis labios con lo bien que se siente esto, cada vez más rápido, llevándome al límite, escuchando solo el sonido de su respiración y la mía, agitados por la excitación.

Hasta que se derrame en mi pecho, puedo sentir el líquido caliente escurrir en mi pecho, su entrada se tensa, apretándome, haciéndome terminar también.

Deja caer su cabeza en mi hombro, paso mis manos en su espalda, beso su cuello, deslizo fuera la venda de los ojos, busco su rostro haciéndolo levantar un poco la cabeza, sus mejillas están sonrojadas.

-Te amo Saengie, en verdad cada día me convenzo más de que estoy con la persona correcta.- beso sus labios

Mi corazón sigue latiendo rápido, sigo en su interior, sintiendo aún como su cuerpo reciente el orgasmo.

Kyu Jong (POV)

Mi respiración está agitada, muerdo mi labio intentando no gemir tanto, pero realmente no lo estoy logrando. Muevo un poco mis caderas en circulo al mismo tiempo en que me levanto y vuelvo a sentarme.

-Rayos Kyu!! Eso fue...- Kiki deja escapar el aire, sonrío al verlo perder el control

-¿Lo hago de nuevo?...- le pregunto, abre los ojos muy grande

-Sii! Hazlo!!.- contesta dándome unas palmadas en los glúteos me río por lo que hace

Respiro hondo, de nuevo me levanto mientras muevo mis caderas girándolas, pero ésta vez provoco que Ki toque mi próstata, eso me hace perder el control a mí.

-Nnnnnhhh...- me siento de nuevo

Llevo mi mano a la base de mi pene y aprieto, no quiero terminar aún, intento controlar mi respiración.

-Kyu, ¿qué haces? Termina, no te preocupes...- niego con la cabeza, vuelvo a respirar hondo

-No...- me levanto haciendo que salga de mi interior.- aún no.... nnhhh...- gimo al sentir como sale.

-Pero...- me sujeta de las caderas, pero me hago a un lado

-No, no...- sonrío coqueto...- tu turno.- abre los ojos sorprendido.- o es que ya te gustó de la otra forma?.- levanto una ceja

-Oh, de que me gustó, me gustó.- sonríe.- pero me gusta más cuando te siento a ti dentro.- muerde su labio

-Entonces abre las piernas Kiki!.- le digo dándole unas palmadas en los muslos

-Claro!!!.- me contesta con una sonrisa mientras abre las piernas, empezamos a reírnos, me inclino para darle un beso

-Por eso te amo Ki.- le digo

-¿Por qué abro las  piernas?.- levanta una ceja

-Si...- contesto siguiendo su broma.- pero también porque eres un alma libre, divertida, que llena mis días de vida.- le doy otro beso

-Oh Dios! Kyu...- sujeta mi rostro para profundizar el  beso

Mis dedos están acariciando su entrada, buscando dilatarlo, será la primera vez que lo hacemos así desde que salió del hospital, estoy un poco intranquilo, no quiero hacerle daño, así que tomo mi tiempo hasta que siento que está listo.

-¿Estás bien? .-

-Sssi... estoy bien...-

-¿No te duele nada?.- me he detenido a mitad de la penetración, vi un gesto de dolor y me dio un poco de miedo

-No Kyu, anda!.- sonrío

-Está bien, está bien.- me inclino a darle un beso.- pero si sientes alguna molestia dime y...-

-Te digo que tengo una molestia.- abro los ojos asustado

-¿Cómo?. ¿Qué ocurre?-

-Que no te estas moviendo! Esa es mi molestia! Anda!!.-

-Ash! Me asustas Kiki...- me rueda los ojos porque sigo sin moverme

No puedo evitarlo, sonrío, me inclino para darle más besos al mismo tiempo en que termino de entrar, rodea mi espalda con sus brazos, desliza lentamente una de sus manos hasta situarla en mis glúteos para apretarlos y obligarme a que me mueva, así que no me queda otra opción más que hacerlo.

Seguimos besándonos, muevo mis caderas lentamente, buscando el lugar exacto, puedo escuchar la respiración agitada de Kiki, mi lengua se pasea por su cuello, mi mano acaricia sus pezones para después tomar su pene para masturbarlo, muevo mi mano al mismo ritmo que mis caderas.

-Oh siii... si Kyu... siii...- Ki empieza a mover su cabeza excitado.- cielos, como extrañaba esto...- su respiración está muy agitada...- Siiii... ahíii Kyuuu... siii...-

Muerdo mi labio intentando seguir sus reacciones, su entrada se tensa conforme sigo tocando ese punto que lo hace gemir, finalmente mi mano se llena de su semen. Me detengo al sentir su entrada apretarse.

-Cielos...- murmuro cuando un cosquilleo recorre mi cuerpo, el orgasmo que provoca Kiki en mí.

Mi respiración está agitada, aún sigo dentro de él, nos vemos a los ojos, me inclino para darle un beso, pero justo en ese momento alguien toca a la puerta de la habitación, nos quedamos quietos, de nuevo vuelven a tocar.

-¿Si?...- Ki pregunta

-Hong Ki...- es Cheol.- disculpa que los moleste, pero creo que necesito ir al hospital.- abrimos los ojos realmente sorprendidos

Salgo lo más rápido que puedo de su interior, intentando no lastimarlo, buscamos nuestra ropa.

-Espera Cheol, tranquilo! Ya vamos!...- Kiki le dice mientras corremos por la habitación vistiéndonos

Parece que está a punto de tener al bebé.