Oppa, Oppa?... Extra 09

-Entonces, ¿si pongo esto en su celular y me aseguro de que nunca lo deje olvidado, podré localizarlo en donde quiera que se encuentre?-
-Así es.-
-Wow Yesung! Es impresionante!! Hubiera querido conocerte hace unos años.-
-Si lo sé, soy muy inteligente para éstas cosas.-

¿Eh? Ah! Hola chicas, regresaron, creí que se irían con Siwon, ¿huh? ¿qué porque estoy siguiéndole el juego a Yesung con esto del rastreador? Es que en verdad creo que lo necesito. Aunque me cueste trabajo aceptarlo, Siwon tiene razón, Ki Bumie ha desaparecido dos veces de mi vista y las dos veces fue realmente desesperante no saber por donde empezar a buscarlo!

-Pero con éste aparato te aseguro que no tendrás más problemas, solo tienes que asegurarte de que Ki Bum no se entere, Wookie no sabe nada.-

¿Qué? ¿de que se ríen?

-En fin, te decía Hangeng, el rastreador me ha servido mucho, sobre todo cuando Wook se pone muy voluble.-
-¿En serio?.-
-Si, como por ejemplo éstos últimos meses, Wook ha estado muy extraño, de pronto está feliz y al minuto siguiente está llorando porque vio en la televisión un drama.-
-Oh! Así como cuando una persona está embarazada!.-
-Si! Exactamente! Como cuando mi Wookie estuvo embarazado y... demonios!.-
-¿Huh? ¿Qué?.-
-Nada! Tengo que ir a buscar a Wookie!.*murmura* embarazado!, ¿por qué no me dijo nada? He estado un mes completo con esos sueños extraños y antojos raros, oh! No me puedo ir sin mi licuado de alfafa.*grita* Siwon!! ¿ya está mi licuado?!!.-

¿Qué fue eso? ¿De que estaba hablando? ¿Ustedes entendieron algo? Bueno, para que me preocupo, ya sé que tarde o temprano me enteraré, no hay nada que no se sepa, siempre alguien termina contándole a otra persona que termina contándole a otra y así hasta que todos los saben. Me agrada éste lugar, es una lástima que tengamos que regresar pronto a Australia.

¿Huh? Pues es que es ahí en donde está una de las filiales de mi empresa, tuve que establecer una ahí. Bueno, pero creo que sería más sencillo que lo entendieran si les platico todo desde que Siwon me echó a andar a mi querido suegro.

Era uno de esos tantos días desde que Ki Bum se fue que yo estaba en mi oficina lamentando mi existencia mientras firmaba uno que otro documento; para ser exactos, habían pasado un poco más de tres meses.


Después de ese encuentro con Siwon, hablé con mis padres sobre hacerme cargo de la empresa y me pusieron un plazo para que la hiciera crecer por lo menos un 10 por ciento para demostrarles que no era necesario el vínculo comercial con la empresa del señor Kim, por eso estuve mucho tiempo agobiado con todo tipo de asuntos de la empresa, aún así no dejaba de preguntarme ¿en donde estaría Bummie?

Y pronto me enteraría que no era el único preocupado, y de la peor manera. Terminé los últimos pendientes, me despedí de mi secretaria y subí al elevador para ir hasta el estacionamiento, la empresa estaba casi vacía, la mayoría de los empleados ya se habían ido a sus casas.

Cuando llegué al estacionamiento, comencé a caminar rumbo a mi auto cuando de pronto un fuerte dolor en la cabeza me hizo detenerme, alguien me había golpeado, me giré un poco para intentar defenderme, vi a dos hombres detrás de mí y de nuevo otro golpe me hizo perder el conocimiento.

Un balde de agua fría me hizo despertar, aún aturdido voltee mi rostro para ver a mi alrededor, no reconocí el lugar, una habitación de madera con casi nada de muebles, solamente la silla en donde me tenían sentado y una mesa frente a mí.

Había varios hombres a mi alrededor, tampoco los reconocí, pero entonces hubo una voz que sí reconocí y que hasta la fecha me da escalofríos escuchar.

-Así que Ki Bum.- abrí los ojos sorprendido

En ese momento sentí que toda la sangre de mi cuerpo se drenaba e iba a parar no sé a donde, intenté ponerme de pie, pero los tipos no me dejaron. Debo aclarar que no me tenían amarrado ni amordazado, simplemente estaban esos tipos grandotes que me impedían moverme.

-Dime Hangeng, ¿cuándo pensabas decirme que habías jugado con mis hijos?.- pasé saliva nervioso
-Yyo...- tartamudee.- nn..no... ju...ju... jugué-
-¿No? Entonces, dime ¿cómo se le dice a lo que hiciste?...- escuché pasos acercándose a mí, de nuevo pasé saliva nervioso
-Yo no...- lo escuché suspirar fastidiado

Y tan pronto como lo escuché suspirar, los tipos comenzaron a golpearme en el abdomen sacándome el aire, de pronto se detuvieron, me volvieron a sentar derecho en la silla. Esta vez el señor Kim ya estaba parado frente a mí.

-¿Te vas a comportar como un hombre o necesitas que te ayuden a serlo?.- me preguntó

Lo sé, es humillantes tener que platicarles esto, pero fue lo que realmente pasó, no estoy orgulloso de eso, pero debo aceptarlo fue un idiota, dejé que muchas cosas pasaran por no haber defendido ante mis padres mi derecho a decidir con quien me casaba.

Sobre todo, por no haber defendido el amor que sentía por Ki Bum.

-Amo a Ki Bum.- Dije con voz fuerte y clara, sin tartamudear

Pero de nuevo, apenas lo dije, vi como el señor Kim levantó una mano, evidentemente la señal para que volvieran a golpearme. De nuevo me sentaron derecho en la silla en cuanto terminaron, apenas si podía respirar bien por la cantidad de golpes recibidos en el estómago.

-De nuevo, ¿vas a decirme la verdad?.- apreté los labios
-No hay otra verdad.- respondí.- amo a Ki Bum, me enamoré de él aún cuando debía estar enamorado de Heechul.- pasé saliva.- y fui un cobarde al no hacer algo al respecto.- respiré hondo.- cuando debí decirles a mis padres, a usted y sobre todo a Hee, que estaba enamorado de Ki Bum.- apenas terminé de hablar y de nuevo el señor Kim levantó una mano

Cerré los ojos, y aguanté sin quejarme los golpes que los hombres volvieron a darme. Terminé tosiendo e intentando aliviar el dolor con una mano sobre mi abdomen. Me acomodé esta vez yo solo en la silla.

El señor Kim caminaba de un lado a otro mientras pensaba. No voy a negarlo, yo estaba muy nervioso, no sabía lo que pasaría después conmigo, ¿y si ya no podría ver de nuevo a Ki Bum? Tal vez ese día sería el último día de mi vida, tal vez al día siguiente amanecería ahogado en el río Han, no sé, había muchas posibilidades de lo que podía pasar.

-Tienes un mes.- fruncí el ceño
-¿Cómo?.- se detuvo de nuevo frente a mí
-Te doy un mes para que traigas a mi hijo de regreso a mi casa.- abri los ojos sorprendido
-Pero...- apreté los labio.- Heechul no...- rodó los ojos
-Heechul no! A Ki Bum! Tienes un mes para que lo lleves a casa, con un acta de matrimonio firmada de por medio!.- abrí la boca sorprendido
-¿Un acta de matrimonio?.- pregunté

Obviamente mi pregunta no fue muy bien recibida, el señor Kim se me quedó viendo fijamente. Se acercó a mí, se inclinó un poco. Me sujetó del cuello de la camisa.

-Mi hijo se fue por tu culpa, engañaste a su joven corazón, más te vale hacer todo por reparar el daño que hiciste!.-

Mi corazón latió rápido. Bien o mal, ése era un permiso para buscar a Ki Bum y pedirle que se casara conmigo! Pero tan pronto como me emocioné, así de pronto caí a una realidad.

-Pero... ¿un mes?.- pase saliva nervioso.- ni siquiera sé si aún está en Seúl...- el señor Kim levantó una ceja
-Es tu problema...-
-¿Qué le parece si me da un mes para localizarlo, un mes para convencerlo, un mes para preparar todo para la boda y...-
-¿Estas intentando hacerte el gracioso?.- apreté los labios
-No...- murmuré, suspiró hondo
-Está bien... tres meses, no más! ¿entendido?.-
-Si!.-

Olvidé preguntar que me pasaría si no lograba traer a Ki Bum de regreso, la verdad no es que quisiera saberlo, no quería trabajar bajo presión, no después de la forma en que habían sucedido las cosas hasta ahora.

En fin, después de pensarlo mucho, de intentar adivinar un mes completo en donde podría estar Ki Bum, decidí que era un completo fracaso como investigador así que recurrí a mi única opción.

-Por favor Heechul, tu debes saber en donde está...- había ido a “El Choi” para buscar a Hee
-Deja de suplicar! Hee no te dirá nada!.- Siwon como siempre de metiche
-...- Heechul no decía nada, solamente mordía su labio, se veía preocupado
-Heechul, no lo hagas por mí y lo que me haya dicho tu padre.- pasé saliva.- hazlo por él, por Ki Bum.-

Apenas iba a sostener sus manos para intentar hacer más efectivas mis súplicas, cuando Siwon pasó su brazo por encima de sus hombros para intentar alejarlo de mí.

-Ya te he dicho que no dirá nada...- Hee volteó a verlo
-Pero Siwon...- éste lo volteó a ver sorprendido
-Hee, ¿no me digas que estás considerando decirle?.- Hee hizo una mueca
-Es que me preocupa mi hermano.- respiró hondo.- sus llamadas cada vez son más escasas, y las últimas veces que hablé con él se escuchaba diferente, como si estuviera muy triste y ansioso.-

Escuchar eso hizo que mi corazón se encogiera, mi Ki Bum estaba sufriendo, y todo era por mi culpa!

-Princesa, pero éste idiota solo lo ha hecho sufrir.-
-Si, lo sé, pero Bummie lo quiere.-
-Es muy joven, seguramente encontrará a alguien más pronto.-

Apreté los labios molesto mientras escuchaba como Siwon y Heechul discutían sobre si me decían o no en donde encontrar a Ki Bum. Prácticamente estaban teniendo una plática entre ellos olvidándose por completo que yo estaba enfrente, o por lo menos eso creí hasta que...

-Yah! Siwon! Yo no veo nada de raro decirle a Hangeng que mi hermano está en Australia.-
-Heechul!!.- Hee sonrió
-¿Qué, dije algo malo?.- Siwon entrecerró los ojos

Obviamente yo estaba con el corazón acelerado, Heechul en verdad estaba ayudándome, Ki Bum estaba en Australia!

-Sabes bien lo que hiciste Hee...-
-No dije nada malo, Australia es muy grande! Si le hubiera dicho, Ki Bum está en Sydney estudiando entonces sería otra cosa!.-
-Hee!!!.-

Siwon pasó su brazo alrededor de la cintura de Hee, lo hizo girar y empezó a llevárselo a la oficina del restaurante. Antes de que lo hiciera entrar Heechul volvió a voltear hacia mí.

-Más te vale que hagas las cosas bien Hangeng o te las veras conmigo.-
-Te lo juro.- sonrió de lado
-Busca a Jung Yunho...- finalmente dijo
-HEECHUL!!.- Siwon por fin lo hizo entrar a la oficina

Por supuesto que fui a buscar a Jung Yunho! Eso no fue una opción, tenía que buscarlo, tenía que preguntarle más datos sobre a donde habían enviado a mi Ki Bum!

Después de hacer una llamado a Siwon para confirmar si efectivamente podían decirme, y de que Heechul le arrebatara el teléfono para decirle a Yunho que podía hacerlo, me dio los datos de la universidad en Sydney.

Tan pronto como pude dejar la empresa sin ningún problema o reunión importante en los próximos días, tomé el primer avión a Australia.

No saben cuan grande fue mi sorpresa cuando llegue a la universidad en donde se supone que estaría estudiando y me dijeron que tenía dos meses que no se presentaba. Mi corazón se aceleró nervioso.

Había ido los primeros dos meses, había tomado todas sus materias, hasta le habían asignado un dormitorio. Pero después fue a darse de baja y ya no regresó. Sentía que estaba de nuevo en ceros. Sino fuera porque ese chico estaba escuchando cuando pregunté por él, todo habría sido un completo fracaso para mí.

-¿Tu eres Hangeng?.- volteo a ver al chico, de cabello rubio
-Si, lo soy.-
-Oh! Si eres guapo.- fruncí el ceño
-¿Me conoces?.- sonrió
-No, pero conozco a alguien que sí.- abrí los ojos sorprendido
-¿Qué?.- tomó una hoja de papel, anotó una dirección y me lo regresó.
-No te diré nada más, solo ve a este lugar hoy después de las 2 de la tarde.- fruncí el ceño mientras leía el papel
-Pero...-
-Tienes que ir.-
-Está bien.- respiré hondo.- gracias...-
-Kevin, mi nombre es Kevin.-
-Gracias Kevin.-

Regresé a mi hotel ese día, ansioso, sin dejar de ver el pedazo de papel con la dirección anotada, ese chico me pareció simpático pero todo me parecía muy extraño. No podía sacar de mi cabeza que tal vez la persona que conocía era Ki Bum, digo, no había nadie más en Sydney que pudiera conocerme!

Vi por última vez la hora en mi reloj, respiré hondo y subí a un taxi para que me llevara al lugar que indicaba ese papel. En todo el camino no dejé de mover mis manos ansioso, el rumbo parecía un poco peligroso, así que comencé a ponerme nervioso de que esto pudiera ser una especie de nueva forma de asalto o secuestro.

Hasta que el taxi se detuvo frente a una especie de escuela comunitaria, había muchos niños corriendo en el patio mientras algunas monjas atendían a otros tantos. Más allá un grupo de jovencitos trabajaban sentados en una mesa, parecía que creaban cosas con sus manos.

Estaba intentando entender porque me había dicho ese chico que viniera a este lugar mientras bajaba del taxi cuando vi que uno de esos jovencito se levanto, giró hacia una de las monjas que estaban cerca dejándome ver su rostro.

Mi corazón se detuvo por unos segundos. Era él! Ki Bum! Bajé un poco la mirada y descubrí algo que nunca pasó por mi cabeza, una linda pancita! Ki Bum estaba embarazado! Mi corazón comenzó a latir rápido. Mi respiración se agitó!

Voltee a ver a mi alrededor, ése lugar era una especie de refugio guiado por monjas para niños huérfanos y jovencitos embarazados.

-Ki Bum!.- no resistí más y lo llamé

Como si estuviera viendo una película en cámara lenta giró para verme, abrió los ojos sorprendido, llevó sus manos a su vientre, como si con eso pudiera ocultarlo. Caminé decidido hasta donde estaba, me detuve frente a él. No podía creer lo que estaba viendo. Me dejé caer de rodillas frente a él.

Retiré sus manos de su abdomen, lo sujeté de sus caderas y pegué mi cabeza a su vientre. Las lágrimas rodaban por mis mejillas, no tenía duda de que ese niño era mío, no podía ser de nadie más!

-Perdóname Ki Bum, perdóname.- comencé a rogarle, no me avergüenza decirlo, porque lo hice, le rogué
-Hanie...- murmuró sorprendido, levanté mi rostro
-Por favor Ki Bum, cásate conmigo, no quiero volver a perderte.- besé su pancita y de nuevo levanté el rostro para verlo a la cara

Ki Bum estaba sorprendido. Sus ojos estaban llenos de lágrimas. Poco a poco su asombro fue remplazado por el llanto, y un puchero.

-Oh Hannie, tenía tanto miedo de tener a mi bebé solo.- me puse de pie para abrazarlo
-No lo harás, ya estoy aquí Ki Bum, ya estoy aquí y siempre lo estaré.-

Mi pobre Ki Bumie apenas tenía 17 años, estaba en un país extraño, sin familia, y con un embarazo que jamás esperó. Era obvio que se sintiera desprotegido, temeroso, y cuando me vio frente a él su corazón sintió un gran alivio.

Después me enteré que ese chico, Kevin, fue el primer chico con el que hizo amistad cuando llegó a Australia, tomaban las mismas clases, y cuando se enteró de su embarazo lo ayudó mucho, todos los días iba a visitarlo y le compraba cosas para el bebé para que no se sintiera solo. Por eso es que nuestro pequeño se llama Kevin, yo no me opuse, ese chico en verdad fue un ángel guardián para mi Ki Bum.

Afortunadamente, no me costó  mucho convencerlo de que se casara conmigo, agradezco que seguía siendo un jovencito que no guardaba rencores ni resentimientos, solo un gran amor, el mismo que yo sentía por él.

-Papaaa!!!.-
-¿Huh? Kevin!!.-
-Hola Hannie.-
-Hola Bummie, ¿cómo te fue?.-
-Bien, aunque Kevin no quería venirse, le gusta mucho jugar con Kwanghee.-
-Si, lo he notado.-
-Ay, pero no sé, ese niño es muy extraño, ¿has visto que siempre quiere usar ropa rosita e intenta hablar inglés?.-
-Bueno, tu también usas ropa rosa de vez en cuando.-
-Exacto! De vez en cuando! Ese niño parece hijo de Sung Min!.-
-Bueno, bueno, pero al niño le agrada, déjalo disfrutar mientras estamos aquí.-
-Está bien, tienes razón. Oh! No estas solo! Perdón interrumpí!.-
-No, no mi amor, les estaba platicando como fue que te encontré en Australia.-
-Oh! Si! Yo estaba muy impresionado de verte frente a mí! Y fue tan romántico *suspiro* -

¿Huh? ¿Qué porque me escondí en casa de Heechul hace unos meses? Oh bueno, eso tiene una buena explicación! Descubrí que Hangeng me había pedido que me casara con él solo porque mi padre lo había amenazado!

-Oye! No es cierto! Ya te dije que yo lo tomé como un permiso!.-
-Si, si, como tu digas.-

En fin, un día lo escuché hablando con mi padre por teléfono sobre algunos negocios que tienen en común en Sydney, y de pronto su conversación dio un giro muy extraño que Hangeng terminó diciendo algo así como:

“Si, ya sé que si usted no me hubiera dado ese plazo para hacer que Ki Bum regresara y se casara conmigo, jamás hubiéramos ese negocio juntos”.

Tenía cinco años casado con él y hasta ese momento me enteré de que mi padre había tenido que amenazarlo, es decir no fue por iniciativa propia! Así que me enojé demasiado, no quería saber nada de él. Todos mis miedos e inseguridades regresaron en ese momento.

Me fui de casa, primero con mi amigo Kevin, pero luego pensé en que debía darle una oportunidad, así que regresé, solo para enterarme que se había venido a Seúl con todo y niño, y para colmo, había venido a buscar a Heechul!

Si, lo sé, mis celos estallaron por completo! Ni siquiera había pasado una semana y él ya había venido a buscar a mi hermano! En fin, las cosas se enredaron un poco, y ya saben, terminé viviendo con Rella unas semanas mientras mis nervioso se tranquilizaban un poco y Hannie logró convencerme de que si me quería y no se había casado conmigo obligado.

Digo, después de todo ya teníamos varios años casados, era demasiado tiempo como para que estuviera fingiendo quererme.

-Es obvio que no me obligaron amor, eres mi todo, tu y Kevin son lo mejor que me ha pasado.-
-Ay que lindo!!! *muack *-
-Oye Bumie.-
-¿Sí?.-
-Estaba pensando en comprarte un celular nuevo.-
-¿En serio?!-
-Si, escoge el modelo que te guste y mañana te lo traigo cuando regrese de la oficina.-
-Waa! Que lindo mi marido! Siempre tan espléndido!!.-
-Lo sé. *muack * anda, ve a buscar a Heechul, dijo que vendrías por una ropita para tus obras de caridad-
-Ah! Si, tienes razón!. Kevin, vamos!.-

Chicas, las dejo, antes de regresar a Australia espero volver a verlas.

-No me tardo Hannie.-
-Si amor.-

Bien, pues prácticamente eso fue todo lo que pasó. Afortunadamente estuve ahí cuando Kevin nació, lo malo es que me perdí cinco meses del embarazo de mi Ki Bum, aunque los últimos cuatro fueron realmente una tortura.

En verdad, si Ki Bum fue así, no quiero pensar en como la pasó Siwon con Heechul, y con dos bebés en camino!, aunque creo que es castigo divino por la forma en que me echó andar a mi suegro.

En fin chicas, tengo que irme, Ki Bum ya está esperándome.

-Henry!!, tráeme la cuenta!.-

Si, claro que lo recordé, Siwon me empinó con la cuenta, pero no se preocupen, lo hago con mucho gusto, gracias por escucharme.

-Aquí está la cuenta.-
-Gracias Henry, quédate con el cambio.-
-Wow! que generoso! De éstos clientes si me gustan!.-
-Bueno, bueno, me retiro.-

Adiós chicas!

Que simpático es el marido de Ki Bum. ¿Eh? ¿Qué a que hora termino mi turno? Mmm, en unos 20 minutos, ¿por qué?

¿Huh? ¿Quieren que les platique mi viaje a Las Vegas? ¿En serio?


Pero Heechul dijo que no podía acercarme a ustedes el día de hoy. Mmm, bueno si dentro de 20 minutos aún no ha regresado, las invito a conocer el departamento que comparto con Zhou Mi. ¿De acuerdo? Bien, entonces no se vayan! Regreso en un rato!

Publicar un comentario

0 Comentarios