Colaboración: Destino o Casualidad... Capítulo 6

Y ahí nuestros ojos se cruzaron
y rompieron la estadística,
toda ley & toda física…

Heechul POV

Hoy me atreví a dejarle un mensaje escrito en su coche. Resulta que mi vecino no es tan snob como pensaba, pues regresaba yo de trabajar y me topé con su coche en la entrada del edificio. Su deportivo se encontraba lleno de polvo y suciedad hasta el tope, ni idea a donde se había ido a meter.

Con mis dedos pude escribir el mensaje, de tanto polvo que tenía, mi mensaje se leía muy claramente.

“Además de mal conductor, eres un amante del polvo. Los aries son algo sucios a veces y eso no lo leí en una revista”

Esta misma tarde mientras terminaba unos bosquejos sentado en el balcón, una cinta bajo del balcón de Siwon con una nota y una toallita enredada. Me apresure a levantarme y desenredar la nota, estaba curioso por saber lo que decía, seguramente habrá notado mi mensaje en su sucio deportivo.

“Quizás mi buen vecino, debería ayudar a este pobre aries a lavar su auto”

Decía la nota que Siwon me había enviado. Al mirar hacia arriba comprobé que estaba ahí, le pregunte si era broma y me dijo que no. Así que obligado a ser buen vecino, baje a ayudarle a lavar su coche, entre bromas y charla. Cuando terminamos, me invitó a cenar muy cerca de donde vivimos, obviamente le dije que no era necesario pero él fue muy persuasivo.

Me tomó de la mano y me llevo casi a rastras. Incluso no dejo que subiera a bañarme, así mojados y sucios como estábamos, nos fuimos a cenar.
No dejamos de charlar mientras estuvimos cenando, Siwon siempre diciendo cosas que me hacía reír y estuvo muy al pendiente de lo que necesitaba. Extendió la pequeña servilleta en mis piernas, despego mis palillos para comer y a menudo llevaba comida a mi boca con sus palillos. Aquella que yo no podía alcanzar.

No se cómo cosas tan sencillas como esta, realizadas con Siwon, se vuelven tan divertidas y gratos recuerdos. Lo mejor es que no soltó mi mano en todo el camino de regreso a nuestros departamentos.

Siwon es algo que no pensé en encontrar, hecho posible, hecho realidad.

Antes de llegar al departamento ya estaba decidido lo que quería hacer, me lanzaría por todo con Siwon. Sé que es necesario para que dar el siguiente paso, porque estoy seguro que no le soy indiferente, me lo ha demostrado de muchas maneras. Debo dejarle claro que me interesa, aunque no sé cómo, quizás funcione lo mismo que con las chicas.

Me doy un golpe mental.

Obvio no, a las chicas se les llega de forma delicada, romántica y algo cursi, eso les encanta; los chicos no son así. ¿Cómo me gustaría que me llegaran a mí? Si odio que me aborden como si fuera filete, ¿Qué debo hacer? Mi inexperiencia con chicos me está matando.

Dejo de subestimarme al ver que estamos frente a la puerta de mi departamento. Automáticamente saco las llaves sin dejar de mirar a Siwon, él me sonríe y mete sus manos a los bolsillos. La puerta se abre, Siwon no se mueve seguramente esperando que lo invite a pasar.

¡Rayos! No estoy seguro de lo que voy hacer, pero lo hago.

Gimo entre angustiado y desesperado, le tomó la mano a Siwon jalándolo hacia dentro de mi departamento, cierro la puerta y estampo bruscamente su espalda contra esta. No dejo de mirar sus ojos, poniendo una mano en cada lado de su cuerpo recargado en la puerta para no dejarlo escapar, si es que es lo que desea. Ya saben, Heechul precavido vale por dos Heechuls.

Sin ninguna suavidad, estampo mis labios contra los de él. Los mordisqueó un poco para derribar sus barreras y que me deje entrar a su boca, no me niega la entrada pues enseguida Siwon abre su boca para mí, correspondiéndome el beso. Me engolosino con sus labios, son tan deliciosos y continuó chupándolos cual si fueran paleta, dejándolos rojos en cuanto nos separamos.

Nos quedamos mirando solamente, es la segunda vez que lo veo tan cerca, la primera vez fue en el elevador; sus negros ojos, sus abundantes pestañas, sus suaves y delgados labios. Además del cuerpo, Siwon tiene un rostro bonito. Los dos estamos demasiado cerca a pesar que separamos nuestros labios, puedo sentir su aliento chocando en mi rostro.

Cierro mis ojos cuando vuelvo a tomar sus labios, sin cambiar de posición y Siwon pareciera que se ha quedado clavado en ese lugar, esta vez es él quien muerde los míos suavemente. Dios, yo estaba tomando la iniciativa, mi primera vez besando a un chico, no cualquier chico, a Siwon y yo había comenzado el beso. Dos veces ya.

Mis manos dejaron la puerta para dirigirse a los brazos de Siwon, ¡rayos! Estaban duros como rocas. Mis manos recorrieron sus músculos hasta llegar a sus hombros, donde caricias circulares se fueron acercando hasta su cuello. Finalmente enrede mis brazos en su cuello, acercándome más a Siwon.

Las manos de Siwon tampoco se quedaron quietas, estas tomaron mi cintura y cuando enrede las mías en su cuello, sus manos viajaron por mi espalda acercándome más a su cuerpo. Recorrió mi espalda con sus dedos, tocando cada vertebra de mi espalda, mandando un pulso eléctrico a cada parte de mi cuerpo.

Lo estaba disfrutando mucho, a pesar que esto inicio de forma brusca de mi parte. Nuestras respiraciones comenzaron a ser más dificultosas, nuestras manos se aferraron más al cuerpo del otro y las ropas, al menos a mí se me hicieron estorbosas. Pues sentía tanto calor, que estaba sofocándome. El calor me hacía querer más, encontrar algo que me diera alivió, nunca antes había sentido algo como esto. Desear tanto a pasar a la cama.

Estuvimos besándonos mucho tiempo más, entre caricias y soniditos que salían de nuestra boca.

En mi búsqueda por ese alivió, me restregué un poco en el cuerpo de Siwon y una pierna se introdujo entre sus piernas, sacándole sonoro gemido y mi boca fue a parar a su cuello. Lo sentí tensarse, su boca detuvo todo movimiento y sus manos en mi cuerpo, me tomaron de la cintura alejándome de él.

- Esto no... – dijo algo pero no lo estuche bien. Llevó una de sus manos a su cabellera, pasando sus dedos hacia atrás -. Lo siento, yo tengo que irme, nos vemos otro día Heechul.

- Siwon… - le hable antes de que se fuera, pero él ya no se volvió y salió de mi departamento.

Quizás fui demasiado brusco, como fui tan tonto para actuar de esa forma. Quizás lo asuste y eche a perder la oportunidad que tenía con Siwon. O quizás recordó que él no es gay.

- Creo que fui rechazado. – suspiro con pesar.


Siwon POV

La segunda vez que me besó, fue como tocar el cielo. No es que la primera vez haya estado mal, pero Heechul me tomó por sorpresa. Deje de ser pasivo cuando sus manos me liberaron de mi jaula y se enredaron en mi cuello. Mis tampoco se quedaron quietas tomando su cintura y después recorriendo su espalda acercándolo más a mi cuerpo.

Heechul no se veía delgado con ropa puesta, su cuerpo se veía muy bien formado, sin embargo mis dedos al recorrer su espalda, pudieron tocar cada vertebra provocándole un cosquilleo que al parecer le gustaba.

A pesar que el beso no era nada delicado, extrañamente sus labios sabían muy dulces y había algo en eso que me provocaba querer más de Heechul. Saboreando su boca lo más que podía, me sentía tan excitado siendo solo un beso. No podía esperar lo que sería cuando tuviéramos más intimidad, cuando nos conociéramos un poco mejor.

Pero que estaba yo haciendo, tomándolo tan pronto como se me mostraba la oportunidad. Cuando yo me había planteado conocerle más, saber las cosas que le gustan, explorar esos puntos que le enloquecen y escucharle decir mi nombre, unido a otra palabra. Heechul no sería otra conquista en mi vida, deseaba todo de él.

Ni siquiera le he dicho que me gusta, que me encanta y que deseo que sea mi novio. Una relación antes de pasar a la cama, este tiempo me ha servido para darme cuenta que Heechul es todo lo que yo había estado esperando para establecerme con una pareja. Es lo que más deseaba.

¿Cómo pude dejarme llevar?

Me detuve y nos separamos respirando pesadamente, cuando hundió su rostro en mi cuello, haciéndome gemir y un temblor sacudió mi cuerpo, cuando sentí que su pierna tocaba mí ya despierto miembro. Maldición, con sus besos y solo con sus besos he quedado empalmado.

Mi mano despeinaron mi cabello hacia atrás, sin dejar de mirar el rostro sonrojado de Heechul y sus labios rojos hinchados de tanto besarlo, sus grandes ojos expectantes, sus pestañas cayendo suavemente sobre sus ojos. Una imagen realmente hermosa de ver.

Aferre sus brazos, separando su cuerpo a una distancia prudente, pues no sabía cuánto me iba a poder contener. Si antes de besarnos ya me traía loco, después de esto, estoy seguro que no podría tocarlo sin tener más de Heechul.

- Esto no puede ser así. – mi voz salió en un susurro, pues todavía no recuperaba mi aliento -. Lo siento, yo tengo que irme, nos vemos otro día Heechul.

- Siwon… - escuche a Heechul llamarme pero ya no di vuelta atrás, necesitaba calmarme. Quien me manda a desearlo tanto.

Porque lo quiero y porque es diferente, con Heechul debo hacer las cosas diferentes.

Han pasado tres días desde aquel increíble beso, tres días en los que he estado alucinando, los mimos tres días que Heechul ha estado evadiéndome. Estoy que me como los sesos pensando en que fue lo que pasó para que se convirtiera de nuevo en mi vecino escurridizo.

Fue alucinante besar a Kim Heechul. Sus carnosos labios moviéndose sobre los míos, exigiendo todo con un beso. Eso me ha dado a entender que es alguien por quien vale la pena hacer las cosas bien, darle todo lo que sus besos exigen, sin dudarlo le daría todo de mí. Sin embargo, aquí estoy, preguntándome ¿Qué hice mal?

Quizás hice mal en rechazarlo de esa manera. Dios, lo rechace después de un estupendo beso, que estúpido fui. Pero mi cuerpo reacciono de una forma que si seguía un momento más a su lado no habría tomado ahí mismo en la entrada de su casa, si es tan lindo y provocador.

Lo he esperado en elevador por más de dos horas todos los días, pero no lo he visto llegar, es como si hubiera cambiado todo su horario. No soy capaz de adivinar la hora en que llega. De los tres días que llevo sin verlo, solo el lunes vi las luces encendidas en su departamento, pero todo el tiempo mantuvo su balcón cerrado. Ni a Heebum lo he podido ver.

Seguramente ahora se esconde de mí, es como si no estuviera en su casa, seguro que lo hizo para huir de mi presencia. Si tan solo supiera sobre alguno de sus amigos, debió refugiarse con alguno de ellos.

Llega el sábado y sigo sin saber de Heechul, tan bien que nos estábamos llevando. Esos pocos días que convivimos, pude darme cuenta de lo mucho que tenemos en común, me gusta tanto. Estaba seguro que yo también le gustaba. No le echo la culpa, lo he estado pensando y lo más seguro es que yo he tenido la culpa de este mal entendido.

Cada día que nos conocimos, cada momento compartido a su lado, todo se me hizo tan familiar como si nos conociéramos de años. Y cuanto más tiempo pasábamos juntos, más tenía esa sensación… Heechul es la persona que mi corazón esperaba para enamorarse, la persona que el cielo me ha mandado para conocerlo…

El amor es esto…

Voy a mi computador, si el destino nos llevó a conocernos y Heechul cree en ello también; debo comenzar a interesarme más en lo que a él le gusta. Rápidamente busco una página con horóscopos, justo como la revista que hojeaba Heechul ese día y me sorprendo al encontrar un montón de cosas que no entiendo.

¿Qué es la numerología? ¿Compatibilidad de signos?
Eso sí lo entiendo, lo demás parece ser un nivel más avanzado, seguramente Heechul tendrá que explicármelo. Eso si algún día vuelve hablarme.

¿Tarot? ¿Runas?
Finalmente encuentro una casilla donde dice que debo de ingresar mi fecha de nacimiento, así que lo hago e inmediatamente me lleva a otra página donde aparece algo que dice calculadora del amor. Vaya no pensé que alguien pudiera calcular eso, así que me da curiosidad y doy clic al enlace, rápidamente me lleva a una página donde debo ingresar los nombres de los dos.

¿Funcionara igual si somos dos chicos?
Bueno que más da, todo esto de por sí ya es una locura… “Calculadora del amor”. Entonces ingreso mi nombre y el de Kim Heechul. No sé qué espero de esto quizás después de mi fracaso, de haber alejado a Heechul busco algo de dónde agarrar valor o algo que me de la seguridad que lo hare bien.


99%


¿Eso qué significa?
Aun no lo sé, pero mi corazón salta porque es casi perfecto. Pudiera ser un 100%, pero después recuerdo que no existe la perfección en el mundo… excepto Kim Heechul. Es la excepción a la regla. Con mis pensamientos centrados en Heechul, continúo leyendo.


75-100: La compatibilidad entre Choi Siwon y Kim Heechul es muy alta, por lo que la probabilidad de que funcione a largo plazo una relación entre los dos no podría ser más alta. Si se cuidan y no se dejan distraer por terceros, vivirán felices y comerán perdices gracias a una relación estable, llena de complicidad y amor.


Esto es grandioso, supongo que el destino no se ha equivocado en juntarnos. Pero más que una página me lo diga, yo lo sentí desde el primer momento que lo vi. Algo me decía que Heechul iba a formar parte importante de mi vida.

Vuelvo a leer los signos con los que soy compatible, los cáncer no están entre esos, pero si dice muy claramente que tendré compatibilidad con los signos nacidos en domingo… cualquier signo. Eso me da más esperanzas que nuestros corazones no se han equivocado.

Si no me sintiera tan inquieto, leería todo lo que hay en la página, por lo que me voy saltando algunos apartados.

Desvió mi mirada al tema del horóscopo de hoy, vaya y es diario, como es que pueden decir ¿qué te va a pasar antes que te pase? Es algo que no entiendo muy bien, pero para que entender si lo estuve viviendo, bueno, Heechul estuvo. Estoy seguro que por eso no se despegaba de esa revista.

Cuando estoy por saltarme eso, mi atención vuelve a mi horóscopo de hoy.


Hoy tu alma gemela puede ser propensa a accidentes…


¿Accidentes? Mi alma gemela, supongo que se refieren a… ¡Heechul! De un salto me levanto de la cama, ¿Qué clase de accidentes? Porque estos horóscopos, o mejor dicho, las personas que los escriben son más exactos, no tengo idea a que se refieren pero me ha puesto inquieto.

De pronto me detengo al recordar cómo es que conocí a Heechul, saliendo del mini súper, él caminando distraídamente con su cara metida en… la revista y yo distraído con la radio. Recuerdo lo que escuche ese día…


“… Aries… su horóscopo para hoy, conocerá de forma inesperada su alma gemela, se puede decir que sea un accidente de amor…”


Como hoy.

Ese día pudo terminar en un desastroso accidente, sin embargo esa vez termino en un afortunado accidente de amor.

Sin detenerme a pensar mucho, tomo mi chaqueta, mis llaves y salgo corriendo fuera de mi departamento. Mi corazón está muy inquieto después de leer aquello, solo quiero estar seguro que Heechul esté bien, aunque no sé por dónde buscar. Creo que mi corazón no se equivocara y me llevara al lugar correcto.

No me puedo rendir, sé que esto no es obra de la casualidad… demasiadas casualidades. Heechul cree en el destino, debo comenzar a creer… somos como piezas que encajamos a la perfección, sé que él fue hecho para mí. Sin buscar más razones, porque nuestra historia ha sido destinada… estábamos destinados a conocernos…


Heechul POV

No pude quedarme en mi departamento sabiendo que en cualquier momento podría toparme con Siwon, por eso hice lo más sensato que podía en ese momento: Huir.

Afortunadamente Leeteuk me dio asilo en su enorme departamento. No me gusta darle molestias, pero era algo que tenía que hacer, mantenerme alejado de Siwon para poder calmar mis sentimientos hacia él. Porque está más que claro que él no desea nada más conmigo.

Quizás haya sido amable solamente, que él lo sea con todo el mundo y haya alterado mi corazón. Pero eso no quiere decir que yo le guste, si a la hora de… no quiero recordar. En verdad pensé que había algo más entre nosotros, su rechazo me dejo muy claro que no es así.

- Chullie, quizás Siwon se quiere tomar las cosas con calma contigo. – me dice Teukie en cuanto termino de platicarle lo que sucedió con mi encuentro con Siwon y ese beso frustrado.

- Quizás se asustó porque no es homo, me dejo muy claro que no le gustó para nada que lo besara.

- No lo besaste, - me dice Teukie perdiendo la paciencia conmigo -. Te lanzaste a sus brazos, lo acorralaste, devoraste su boca y todavía así quieres que el pobre no haya puesto distancia entre los dos.

- Eso es lo que tú crees.

La verdad es que ya no deseo hablar de lo sucedido, me duele mucho. Siempre supe que llegaría el día en que sintiera el rechazo. Cuando andaba con chicas siempre lo pensé, pero jamás imagine que sería un chico el que lo haría, mi primer enamoramiento con uno de ellos y me siento peor que feo.

A Siwon no le gusto que lo besara, si le pareciera atractivo en ese momento habría tomado lo que yo le estaba ofreciendo.

Me hago el tonto colocando las sabanas limpias que me ha dado Teukie para ponerlas en la cama de invitados. No sé cuánto tiempo voy a estar aquí, me siento afortunado con que Teukie tenga cuarto de huéspedes.

- No crees tú que Siwon se esté guardando para darte lo mejor. Es decir, por dios que solo son amigos ahora, no se han dicho más que unas cuantas palabras y solo han cruzado unos cuantos diálogos. – mientras habla comienza ayudarme con la cama -. No son más que vecinos, desde mi punto de vista Siwon ha hecho lo correcto.

- ¡¿QUÉ?! El despreciarme y haberme hecho sentir peor que nada, ¿está bien para ti?

- ¡Ay, no seas dramático! – se cruza de brazos delante de mí -. A mis ojos, Siwon hubiera perdido valor y ser la perfecta pareja que deseo para ti Chullie, si ese día él hubiera cedido fácilmente a tus encantos.

- ¿No te entiendo? – le pregunto derrotado sentándome.

Lo veo rodear la cama y sentarse a mi lado, pasa sus brazos alrededor de mi cuerpo y me abraza. Los abrazos de Teukie siempre me confortan y me hacen sentir seguro. Es una lástima que mi amigo se haya encontrado al mapache apestoso y fantasioso.

- Que tú mereces algo más que un acostón de momento. Chullie si ya has esperado mucho por encontrar a ese hombre que te haga ver la luna y las estrellas… ¿Por qué no esperas a que Siwon te explique? Yo creo fervientemente que él tuvo sus razones para rechazarte en ese momento.

- ¿Tú crees?

- Estoy completamente seguro. A ese chico… le encantas.

- ¿Cómo sea, puedo quedarme aquí? – le pregunto algo inseguro.

- El tiempo que quieras. – me contesta Teukie palmeando mi pierna -. Nada más que al dormir por favor mete seguro a tu puerta, no vaya ser que en un arranque de pasión quiera cumplirle su fantasía a mi mapachito.

Termina de decirme y se levanta rápido para alcanzar la puerta antes de que alguna de las almohadas lo alcance.

- ¡Son tal para cual! Par de pervertidos.

C o n t i n u a r a . . .