Colaboración: My Rain and You... Capitulo 9

Esto no puede ser ¿Cómo puedo dejarte ir?
¿Cómo puede cambiar todo con solo una palabra?
¿Cómo puedo vivir un día sin ti?
Estoy asustado, no estoy bien
Sabes que no tengo otra elección
Más que hacer esto…
Don't Say

Después de la llamada de su hermano, Kyuhyun se quedo algo tranquilo y sintió que el alma le volvía a su cuerpo. Siwon era el único que conocía su secreto, el tenia pensado no decirle a nadie sobre su relación con Sungmin, pero Siwon lo noto diferente y misterioso al grado que ya no pudo esconderle mas sus sentimientos a su hermano.

Para su sorpresa este en vez de reprenderlo, lo entendió y le apoyo con sus escapadas a España o en las visitas que Sungmin hacia a Seúl.


___Flashback___

Pero para cualquiera de su familia era un secreto que se había comprometido en su estancia en España con Lee Sungmin, hijo de una de las familias mas prominentes de ese país y proveniente de una línea de realeza.

Si sus sesenta y cuatro parientes, entre primos, sobrinos y tíos, fallecían todos al mismo tiempo, Sungmin seria el siguiente en obtener el trono de la realeza de España. Derecho que le daba al ser su madre Duquesa de Arnelles, ya que su padre siendo Coreano no fue muy bien aceptado por la familia de su madre.

Pero al ver que este era bastante acertado en los negocios y que su fortuna aumento en poco tiempo, todas esas diferencias del pasado en la familia de su madre quedaron olvidados. Por lo que Sungmin era un coreano-español muy querido por ambas familias. Lo que lo hacia un consentido, pues bien sabia de su linaje.

El conocer a Sungmin para Kyuhyun fue un placer, en su interés por aprender el idioma español y la cultura de este lo llevo a estudiar su carrera a España. Para su suerte, su padre acepto esto con una condición, no fue difícil que aceptara ya que así lo mantendría alejado del peligro y no tendría que preocuparse tanto por el, pero Kyuhyun tuvo que prometer que al termino de su carrera tendría que regresar a casa.

Es obvio que acepto, el mas que nadie deseaba mantenerse lejos de todo lo que su familia era en Seúl, le daba miedo que alguna vez alguien lo agarrara en venganza de su padre. Pero al aceptar este trato jamás pensó que en aquel país encontraría el amor.



Hace cinco años cuando llego por primera vez a España Kyuhyun llevaba un nivel de español algo pobre, sabia preguntar por el baño, pedir de comer, preguntar direcciones (aunque cuando se las decían no les entendiera), sabia presentarse y eso, solo lo básico. Jamás imagino que hablaran tan rápido y de corrido, su español más bien era lento y muy claro.

Por lo que se sintió aislado por un tiempo, conoció a varios estudiantes de intercambio que como él, se adaptaban lentamente a la forma del idioma, pero también eran de otros países, indonesia, Japón, que con señas se comunicaba y su escaso chino le permitía comunicarse con chicos de este país lo cual era un respiro para él.

Sin embargo su inteligencia le basto para que en un año pudiera comunicarse correctamente con todos, su confianza volvió y pronto se volvió alguien popular en el campus, siendo invitado a todas las fiestas que se organizaban en el. Y no solo eso, con las chicas era bastante popular, con los chicos de igual manera, incluso los rudos ya que era un buen bebedor lo que para su delgado cuerpo era algo asombroso para estos hombres, volviéndose un miembro mas de su grupo.

En una de esas fiesta fue que conoció a Sungmin, las fiestas a las que era invitado de vez en cuando subían de categoría, se encontraba en una de esas donde el dinero se desborda en cada detalle, aun no eran las doce de la noche y ya todos estaban bastante divertidos y bebidos, pero la fiesta no se le veía fin.

Kyuhyun se alejo un poco del bullicio, con una copa de vino en mano ofrecida por el dueño de la casa que resulto ser el padre del chico que organizo la fiesta. El señor quedo encantado con los conocimientos que Kyuhyun tenia sobre vinos y eso era algo que se apreciaba en demasía en España. A Kyuhyun le gustaba degustar el vino en forma solitaria, hasta ahora siempre había estado solo.

Esa costumbre no se le quitaba, por eso apartado de todos se disponía a beber de ese vino que le habían ofrecido y que por la cosecha de este, debía estar delicioso hasta desbordar sus sentidos.

Se encontraba en una de las terrazas de la casa que daba hacia la salida, primero escucho una melodiosa voz que más bien parecía un tintineo, pensó que era una chica la que hablaba, pero lo que mas le sorprendió es que estaba hablando en coreano y maldiciendo en todas las formas posibles.

No quería ser mal educado al escuchar conversaciones ajenas, pero al ver salir a la persona de la espesura del jardín no pudo moverse mas, toda su educación se fue por la borda al quedarse embobado viendo aquel ser tan curioso.

Sungmin vestía un pantalón negro que se ceñía a sus piernas donde pequeñas rasgaduras del pantalón dejaban ver su piel, arriba llevaba puesta una camiseta de red blanca que dejaba ver desde su pecho hasta su abdomen, encima llevaba puesta un tipo de chamarra de una tela transparente negro con amarillo que lo hacían ver realmente sexy; tanta piel expuesta bajo esas livianas telas.
El cabello lo llevaba algo largo y oscuro, que estaban peinados de una forma moderna que dejaban despejada la frente de este, Kyuhyun no sabia porque pero a el esto le pareció sumamente atractivo, definitivamente ese chico tenia una bonita frente y uno de sus fetichismos eran las frentes bonitas. Iba bastante enjoyado y al sostener el celular, Kyuhyun se dio cuenta que llevaba puesto un reloj carísimo de marca.

Todo esto quedo en segundo plano para Kyuhyun al ver como ese ser de baja estatura y gestos exagerados seguía maldiciendo y discutiendo con la persona al otro lado de su celular, en un coreano bastante fluido.

Al parecer con quien peleaba era su padre y este no parecía ceder, entonces el mas bajo comenzo a hacer gala de sus ruegos pucherosos, lo que hizo reír a Kyuhyun sin poder contenerse y su risa alarmo a Sungmin que se dio cuenta que no estaba solo en ese apartado lugar.

Sungmin vio a Kyuhyun en la terraza sonriendo con una copa en la mano, le pareció alguien mayor a la distancia, pero lo mas extraño es que no sabia porque se reia.. Decidió que era mejor terminar la charla molesta con su padre ante el curioso y por una vez en su vida dejarse vencer por su padre.

- Yo siento haber escuchado tu conversación –se disculpo Kyuhyun en coreano

- Es de mala educación escuchar –le reprocho Sungmin también en coreano

Unos segundos después, Sungmin abrió muy grandes sus ojos ante lo que escucho, hablaba en coreano y un coreano perfecto. Le asombro porque eran pocos por no decir muy pocas las personas venidas de Corea a ese país y casi todas las que conocía eran personas mayores o su familia, lo cual ya era aburrido.

Se acerco rápidamente a donde se encontraba Kyuhyun y este lo recibió con una linda sonrisa.

- Tu… eres de corea?

- Se me nota mucho –contesto divertido Kyuhyun

- No… digo si –Sungmin había sido atontado por la hermosa sonrisa que le mostraba el extraño- es que es muy raro encontrarme a alguien que sabe… que habla…

- Si, yo te entiendo –no lo dejo terminar Kyuhyun- para mi también es un gusto encontrarte, mi nombre es Choi Kyuhyun –tendiéndole la mano

- Lee Sungmin –tomando su mano- en verdad vienes de corea?

- Si, estoy estudiando mi carrera aquí, convencí a mis padres que me dejaran venir

- Que suerte, a mi no me dejan salir de la ciudad sin todo un sequito

- Hahahaha por eso mismo estoy en este país, me libre de mi sequito o mas bien vigilantes

- Eso para mi seria fantástico, pero ya vez… -Sungmin suspiro- hoy he perdido a mis guardias para venir a esta fiesta y mi padre ya me esta retando para que vuelva a casa –diciendo esto ultimo con bastante melancolía

Y es que por lo que Kyuhyun pudo escuchar al final de la conversación telefónica, Sungmin cediendo a las órdenes de su padre y se iría pronto de la fiesta. Algo en Kyuhyun despertó, no quería dejar de verlo y mucho menos dejarlo ir tan pronto.

- Yo te puedo llevar

- Que has dicho? –Sungmin se sorprendió

- Que si te llevo, puedo servirte de excusa con tu padre, quizás que hayas conocido a otro coreano te ayude un poco

- Tienes razón –su mirada se ilumino de repente y Kyuhyun pudo conocer otra faceta de Sungmin- harías eso por mi en serio, no sabes cuanto te estaría agradecido –Kyuhyun tenia a un Sungmin muy contento colgado de su brazo mientras caminaban hacia la salida de la fiesta, de esa manera muy juntos Kyuhyun podía ver de arriba el pecho bronceado del bajito y le gusto lo que veía

Pasaron por sus abrigos, Kyuhyun ayudo a Sungmin a colocarse el abrigo, algo que divirtió a Kyuhyun fue ver como el mas bajito se abrocho rápidamente la camisa blanca que llevaba para después colocarse el abrigo rosa que le restaba un poco de ese calor que le provoco al verlo la primera vez. Pero también pudo notar que ahora se veía adorable y bastante tierno.

Afortunadamente su plan funciono, el papa de Sungmin quedo maravillado con Kyuhyun, sobre todo al hablar de su país y lo bien enterado que estaba Kyuhyun de todo. Además compartió con el sr Lee una copa de vino que Kyuhyun describió como un experto catador.

Y ese fue el comienzo de muchas de las visitas que haría a la familia Lee, donde Kyuhyun siempre era bien recibido volviéndose cada vez mas cercano a Sungmin, el cual pronto dio cuenta de lo mucho que le gustaba el mas alto.

Un año paso para que Kyuhyun se decidiera a revelar sus sentimientos a Sungmin por temor de ser rechazado ya que el más bajito era muy popular, pero n su lugar este con felicidad acepto los sentimientos del otro, lo único que Sungmin le pedía era que mantuvieran su noviazgo en secreto por ahora. Esto le pareció algo raro a Kyuhyun, pues no era normal ya que era bien aceptado por la familia Lee, no sabía que pretexto podrían ponerle a Sungmin.

Así que después de año y medio de relación, Kyuhyun no soporto mas tanto hermetismo por parte de Sungmin a su familia y una noche donde fue invitado a una cena formal que la familia Lee ofrecía, decidió hablar con el padre de este y hacerle saber sobre su relación con su hijo.

- Debo decirle que Sungmin y yo somos novios hace mas de un año, he querido decírselo desde el primer momento pues Sungmin me importa mucho y deseaba hacer lo correcto con él, pero me lo ha prohibido no se porque. Solo quiero decirle que no tome a mal esto que le digo y que comprenda que amo a su hijo y mis sentimientos hacia el son muy reales

Ante estas palabras el padre de Sungmin se levanto de su asiento haciendo que Kyuhyun se levantara del suyo algo asustado, el Sr Lee se acerco y le abrazo felicitándolo, estaba muy feliz que fuera el elegido por el corazón de su hijo.

Y así con un brazo sobre los hombros de Kyuhyun el sr Lee lo llevo ante todos los invitados que se encontraban en la cena, para dar la noticia del compromiso adquirido por su hijo Sungmin. El cual al escuchar las palabras que su padre decía no pudo evitar la sorpresa y ver a Kyuhyun, que había desobedecido su petición.

Kyuhyun sintió que algo se le atoro en la garganta pues no podía hablar ante las muchas felicitaciones que recibía por el compromiso. Sintió como era jalado por una pequeña mano que lo aparto de todo, era Sungmin.

- Porque lo hiciste? –pregunto enojado- has visto lo que causaste, por eso no quería que dijeras nada ahora mi padre piensa que nos casaremos algún día, que eres mi prometido y nos hará usar los anillos, todo se volverá un caos cuando sepa que nada de eso podrá ser… -Sungmin se movía de un lado a otro al estar hablando, Kyuhyun lo tomo de los hombros y lo volteo hacia el

- Detente por favor, yo siento que esto haya tomado ese rumbo por mi causa, pero en ningún momento me he negado a casarme contigo. Te amo Sungmin y si quiero, quiero terminar casado contigo

- Pero ni siquiera conozco a tu familia y no sabes si ellos aceptaran, que pasara si el día de mañana no puedes cumplir el compromiso, mi familia quedaría destrozada y yo mas, porque después de esto amándote como te amo, no creo que pudiera querer casarme con alguien mas –Sungmin comenzaba a sollozar

- Sshhhh ssshhh conejito, yo te voy a amar siempre…

Kyuhyun paso los últimos semestres de su carrera bastante enamorado y su situación con la familia Lee era grandiosa. Cada día quería más a esa familia, más que a la suya. Hasta que llego el día en que tenia que regresar a corea, le propuso a Sungmin regresar con el para presentarlo a su familia. Los padres de Sungmin aceptaron que así fuera, pues primero tenían que conocerlo a él, y ya después irían ellos a conocer a sus futuros suegros.
Tan solo llegar todo fue un caos, su padre ni siquiera le dejo contarle lo sucedido cuando ya se encontraba comprometido con Kim Heechul, que sea quien sea la persona de ese nombre no le decía nada porque no lo conocía y sin embargo le desbrozaba la vida, a él y a su conejito.

No podía oponerse a su padre pues ese había sido el trato, además que a pesar de que no sabía mucho del mundo en que se manejaba su padre, sabía que si desobedecía el que pagaría las consecuencias de sus actos seria Sungmin. Y por eso no lo iba arriesgar, preferiría unir su vida a ese Kim antes de poner en peligro a su amor.

Varios días se guardo eso para el mismo, y cuando se entero que el Kim había escapado, con esto le dio a entender que tampoco el estaba de acuerdo con la boda, le dio la esperanza de que la boda no se realizaría. Pero todo se derrumbo cuando Siwon localizo a su futuro marido.

Tuvo que decirle a Sungmin, lloraron juntos y se prometieron que nada los separaría, que su amor seria por siempre como cuando Kyuhyun lo prometió el día de su compromiso. Fue Sungmin el que le ordeno a Kyuhun que se casara con la persona que su padre le imponía, sabia que si no lo hacia este lo pasaría muy mal pues no ignoraba a lo que su suegro se dedicaba.

Y a pesar de todo Sungmin estaba dispuesto a convertirse en el amante de Kyuhyun con tal de no perderlo pues lo amaba y era su vida. Las palabras más dolorosas las que escucho Kyuhyun al salir la palabra amante de la boca de Sungmin, de prometido a amante fue demasiado doloroso para él.

Pero se contuvo, porque para Sungmin debía ser mil veces más dolorosos, aun no sabia que iba a decirles a su familia. Por lo pronto el mas bajo decidió no decirles nada y darles largas alegando problemas en la familia de Kyuhyun, por nada mancharía su imagen ante sus padres.

Sungmin no deseaba estar presente en la boda de Kyuhyun, por lo que antes de que este conociera a Heechul, opto por regresar a España para mantenerse lejos hasta que ocurriera el evento doloroso para él. Para evitar pensar que el que debía estar casándose con Kyuhyun era él y no ese otro.

Se despidieron unos días antes, pero Kyuhyun no pudo resistirse a no verlo aunque fuera un instante más. Se dirigió precipitadamente al departamento de Sungmin, esperaba encontrarlo antes que se marchase, deseaba decirle tantas cosas aun y se sentía estúpido por tener que dejarlo ir de esa manera. Sospechaba que su vida sin Sungmin seria muy vacía, necesitaba escuchar esa promesa que lo mantendría vivo de su boca nuevamente.

Llego al departamento pero no encontró a nadie había llegado tarde, recorrió los cuartos de ese lugar donde fue muy feliz. En donde estaba la cama había un pañuelo de su amor, se dio cuenta que Sungmin lloro quizás tanto como el la noche anterior.

Ese pañuelo con lágrimas le dio el empujón que necesitaba, lo vería antes de irse. Llamo por teléfono rápidamente dando una orden que no daba oportunidad a no hacerlo.

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Sungmin estaba cansado pues la noche anterior no durmió mucho, escondía sus hinchados ojos bajo las gafas de sol. Lloro, lloro todo lo que necesitaba ya que al llegar a España no se permitirá llorar para no levantar sospechas con sus padres, debía mantener la farsa hasta que pudiera regresar a lado de Kyuhyun.

Menos mal que llego a tiempo al aeropuerto, llevaba una pequeña maleta de mano ya que sus demás maletas estaban registradas. Solo deseaba embarcar para dormir un poco más y estar fresco al llegar a su hogar.

Al pasar por el chequeo de papeleo, sucedió algo que lo saco de la fila y lo llevo hasta una apartada oficina, eso era lo único que le faltaba, que en su pasaporte hubiera algo mal. Agradeció que al menos no le encontraran nada raro en las maletas o ya se veía atrapado como la protagonista del diario de Bridget Jones.

La oficina se encontraba solitaria, solo una persona estaba con el y se encontraba sentado en el escritorio frente a el dándole la espalda en su alto asiento. Iba a pronunciar su discurso para que lo dejaran ir antes que perdiera el avión, pero la persona en el asiento se dio la vuelta encontrándose con la mirada de Kyuhyun.

¿Cómo es que se le ocurrió esto para detenerlo? Tanta era su urgencia por no dejarlo ir, no tenían nada de que hablar ya todo había sido aclarado entre ellos. Y el mismo, Sungmin no deseaba alargar su agonía con la cruel despedida.

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1 Comentarios

  1. Podre Sugmin... debio haber sido miu difixil para el todo esto.

    Gracias por el cap

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